La apuesta de Panasonic con su Lumix DMC-CM1 es llamativa, pero no revolucionaria. 20 megapixeles con sensor de 1" es tecnología de hace un par de años, como la DSC-RX100 que presentó Sony en agosto de 2012.
Sin embargo, sí que parece que han conseguido reducir la distancia desde el objetivo al sensor, aunque si no me equivoco lo hacen a base de colocar una óptica realmente pequeña, pues tengo la impresión de que sólo es objetivo lo que queda dentro del anillo plateado. Esta óptica es de focal fija, un gran angular de 28mm con f/2.8.
Con respecto al tamaño del sensor, en mi opinión es condición necesaria, pero no suficiente. Para un conjunto redondo necesitamos además una óptica pensada para optimizar los resultados de ese sensor y un software de procesado de las imágenes que ayude a obtener unas imágenes de calidad y que se encargue de corregir en tiempo real las imperfecciones de la óptica.
El sensor es una de las piezas clave para obtener fotografías de calidad y que marquen una diferencia en condiciones de iluminación justas. Con buena luz casi todas las cámaras de hoy en día resuelven fotografías decentes, pero con poca luz se nota mucho si el sensor es capaz de extraer el máximo de información sin añadir excesivo ruido.
Esos 20 megapixeles me resultan excesivos para ese tipo de cámara y me recuerdan a la Sony RX100 que probé cuando salió al mercado, también tenía un sensor de 1" y la óptica estaba firmada por Carl-Zeiss dentro de la serie Vario-Sonnar T* con una focal 28-100mm y una apertura f/1.8-4.9. No estaba nada mal, pero no sus imágenes no me enamoraban, y es que el procesado que hace Sony no tiene nada que ver con el de Fuji, que sí que me sorprende con la combinación del sensor X-Trans de tamaño APS-C y el procesador EXR, con colores muy naturales, sobre todo en los tonos de piel.
Esta imagen sirve perfectamente para situar el tamaño con respecto al resto de cámaras hasta el tamaño APS-C. Me gustaría ver una cámara de móvil con ese tamaño de sensor, pero como ya habéis dicho hay limitaciones físicas, y es que no hay que olvidar que la óptica es pura física y salvo que inventemos algo distinto, seguirán habiendo límites.
Sin embargo, sí que parece que han conseguido reducir la distancia desde el objetivo al sensor, aunque si no me equivoco lo hacen a base de colocar una óptica realmente pequeña, pues tengo la impresión de que sólo es objetivo lo que queda dentro del anillo plateado. Esta óptica es de focal fija, un gran angular de 28mm con f/2.8.
Con respecto al tamaño del sensor, en mi opinión es condición necesaria, pero no suficiente. Para un conjunto redondo necesitamos además una óptica pensada para optimizar los resultados de ese sensor y un software de procesado de las imágenes que ayude a obtener unas imágenes de calidad y que se encargue de corregir en tiempo real las imperfecciones de la óptica.
El sensor es una de las piezas clave para obtener fotografías de calidad y que marquen una diferencia en condiciones de iluminación justas. Con buena luz casi todas las cámaras de hoy en día resuelven fotografías decentes, pero con poca luz se nota mucho si el sensor es capaz de extraer el máximo de información sin añadir excesivo ruido.
Esos 20 megapixeles me resultan excesivos para ese tipo de cámara y me recuerdan a la Sony RX100 que probé cuando salió al mercado, también tenía un sensor de 1" y la óptica estaba firmada por Carl-Zeiss dentro de la serie Vario-Sonnar T* con una focal 28-100mm y una apertura f/1.8-4.9. No estaba nada mal, pero no sus imágenes no me enamoraban, y es que el procesado que hace Sony no tiene nada que ver con el de Fuji, que sí que me sorprende con la combinación del sensor X-Trans de tamaño APS-C y el procesador EXR, con colores muy naturales, sobre todo en los tonos de piel.
Esta imagen sirve perfectamente para situar el tamaño con respecto al resto de cámaras hasta el tamaño APS-C. Me gustaría ver una cámara de móvil con ese tamaño de sensor, pero como ya habéis dicho hay limitaciones físicas, y es que no hay que olvidar que la óptica es pura física y salvo que inventemos algo distinto, seguirán habiendo límites.