Atención: vá ladrillo.
Toda la puta semana llevaba dandole vueltas a este tema.
Me traia inquieto lo de dejar un juego con tanto potencial, no entendía como era posible que todo el mundo estuviera tirando para alante y yo ahí estancado pensando en dejarlo. Así que este finde le he dado caña, y por fin conseguí la dinamica que necesitaba para arrancar: había zonas que me conocía de memoria y sabia por donde me iban a salir los hijos de mil putas estos, así que para allá que iba, conseguía ecos, los cambiaba por mejoras, otra vez vuelta a empezar. Me topo con la posibilidad de mejorar el hacha, le meto tres mejoras.
Viene uno de esos cabrones de las antorchas que odio a muerte, ahí viene, cabrón. Me ha matado tantas veces que ya conozco de sobra sus movimientos, asi que sé cuando tengo que cargar el arma para meterle un doble giro, desestabilizarlo y empezar la lucha con cierta ventaja. Con las mejoras al primer giro el hijoputa cae al suelo, BUM. Me topo con un grupo de cabrones, doble giro, todos caen. Alguno se dispersa, pero morir tantas veces me ha dado una rapidez endiablada, y practicamente conozco todos los movimientos de cada uno de ellos. Fijo el objetivo, ruedo, todos a tomar por culo. Dejo la zona limpia. Limpia es LIMPIA, da igual quien se cruce (gordos con hachas, trolls, lobos, ese cabrón que se parece a Pennywise y siempre me espera detrás del mismo barril....).
Me veo fuerte para enfrentarme al primer jefe, voy para allá, antes me he comprado un traje muy molón para que ese cabrón sepa que la historia no va a ser la de siempre.
Le machaco sin piedad, los viales ya no me importan, no me tose ni dios.
Cae.
Me voy a buscar lo proximo e increiblemente rapido llego al segundo jefe, El padre Cascoigne. Joder, me encanta el diseño de este personaje, su voz, el sitio donde vamos a enfrentarnos.... todo.
Entro por la neblina, andando con la chuleria propia de los varones de mi familia, a la primera le machaco sin piedad. Pero el puto enfrentamiento me está gustando tanto que bajo la guardia y dejo que me reviente. 8000 ecos a tomar por el culo, y me la suda. Volveré a por ellos..
Y así es, vuelvo, le destruyo en cuestion de un minuto, y tiro escaleras arriba.
Joder, me he hecho grande que te cagas, aquellas bestias que antaño me aterrorizaban y ocupaban mis pesadillas ahora besan mis pies.
MENUDO PUTO JUEGAZO.