Pero es que así son las cosas. Puedes clamar todo lo que quieras, que si el ejército egipcio se carga a mil quinientas personas por sus cojones, tus líderes mirarán para otro lado. Y lo peor, puede que a lo mejor hasta convenga mirar hacía el otro lado, pues puede que a tu país le convenga más que esté el ejército que estén los Hermanos Musulmanes. Nos puede valer o no, pero así es.