Pues a lo tonto las voy viendo casi todas, puedo opinar hasta por etapas. De los 70's me ha subido Sisters (1973), qué bien aguanta y cómo marca y define exactamente su cine más personal: industria del entretenimiento (ese concurso Peeping Toms!), tramas locas de serie b (aquí con mad doctor incluido), onirismo, sexo, asesinato, desenfado y humor (delicioso Charles Durning). Aquí lo que es verdaderamente extraordinario es el cambio de punto de vista de ventana a ventana, de Margot Kidder a Jennifer Salt con una pantalla partida acojonante. Disfruté a lo bestia.
La mejor de esa etapa sigue siendo Phantom of the Paradise (1974), una obra única e irrepetible con esa magnífica música y personaje de Paul Williams y, sobre todo, unos Finley, Gerrit Graham y De Palma desatadísimos.
Obsession (1976) sigue hipnotizando y está medidísima, tiene un arranque demoledor y Zsigmond y Herrmann aguantan el pulso hasta ese loquísimo final en que la película vuelve a subir, es curioso como Lithgow es tan bueno que llegas a ir con él en lugar de con el tontolaba de Robertson y no creo que sea casual, Lithgow le da ese espíritu lúdico a la película que, sin él, estaría acartonada con el patético protagonista. Obligatoria para cualquier depalmiano pero creo que inferior a las 2 anteriores (ojo, superior a las 2 siguientes).
En Carrie (1976) el guión se le queda corto a De Palma, hace todo lo que puede de manera brillante, estructura la película, define personajes, picos emocionales, conspiraciones, monta una set-piece eterna al final ... pero todo este circo necesita más locura que el cuentito de terror de Carrie. Es difícil sacar más petróleo de ahí.
The Fury (1978), igual que Sisters, también me ha subido bastante (venía de mucho más atrás), es cierto, es más irregular que Carrie, menos consistente, hay 2 tramas que casi van en paralelo como si fuesen 2 pelis distintas y a media película pega un bajón de ritmo ... pero ésta sí que tiene la locura necesaria en su texto para disfrutar de De Palma sin frenos, toda la primera parte de espías es cojonuda con ese aire a thriller setentero, cuando toca el fantastique es deliciosa, tiene set-pieces acojonantes, y explota (jeje) al final, vamos, que no sé si es mejor peli que Carrie pero la que tengo más ganas de volver a ver es The Fury.
Esta etapa es brillante, pero después vi en sesión doble Snake Eyes (1998) y Femme Fatale (2002) y fue un orgasmo, el De Palma maduro y noventero (y continuación) me parece superior, ojo que venía de Raising Cain (1992), Carlito's Way (1993) y Mission Imposible (1996), limita el barroquismo al texto, la puesta en escena es más limpia y depurada, clava más el tono de cada película, Snake Eyes si le hubieran dejado montar el final de cine de catástrofes con la ola gigante sería directamente una obra maestra, tiene una hora inicial que es de ver para creer, de un virtuosismo narrativo tanto en el uso de espacios, del punto de vista, del uso de vídeos y cámaras dentro de la película, es todo como una mega set-piece continua. Y después Femme Fatale, que ahí sí que no tuvo restricciones y es redonda, ya desde la intro seductora con Double Indemnity y ella reflejada en la pantalla, la antológica secuencia misionimposibilesca del atraco en Cannes, la introducción del punto de vista de Banderas, varias set-pieces gloriosas en Paris (la de la iglesia y el apartamento, y la ralentizada del camión), onirismo, agua, el acojonante pasaje sexy que anticipa Death Proof, el deja-vu con secuencia repetida y montada diferente y el precioso mosaico fotográfico final que metaforea la propia película, gloria bendita.
En medio Mission to Mars (2000), que tiene cosas muy tiernas como la relación entre todos y otras muy chulas como la presentación a lo Boogie Nights, el montaje paralelo con tiempo diferido entre la catástrofe en Marte y la estación en la que les informan, elegantísimas secuencias de ingravidez o el misterio que genera Marte, pero tiene un final dónde acabaron la pasta y se nota mucho, además de que es cumbayá de demás. Además, De Palma ya entró en el proyecto sin demasiado margen y se nota en el tratamiento del texto. Apreciable pero fallida.
Pronto me pongo con sus maravillas de los 80's.