Estos días hay bastante violencia (verbal, por supuesto) contra los políticos. Que si habría que ahorcarlos a todos, que si había que lapidarlos... yo soy más civilizado (intento ser, las tripas me piden otra cosa). Me limitaría a escoger a un político que fuese culpable de fraudes, cohechos, robo, de influencias... a cualquiera que se hubiera demostrado inmerecedor del cargo con creces. Y le quitaría todo lo que tuviese. Cuentas embargadas. Bienes embargados. Seguimiento completo de actividades. En cuanto se detecte dinero movido entre países... embargado. En cuanto se le pille haciendo uso de algo que no debe tener... embargo.
Después, se embarga también a sus familiares más allegados. ¿Que su cuñado tiene un negocio? Nacionalizado. ¿Que su hijo tiene unos ahorrillos? Embargados. Si se hiciera así, solo haría falta hacérselo a uno, porque el siguiente que llegara se lo pensaría dos veces.
Por supuesto, eso es imposible porque "la ley no es así" "la gente tiene derechos" y "vivimos en un estado democrático" frases de las que esta gente abusa y de las que se echan unas coñas cuando se van de caza con los colegas. Pues ya me diréis cuando se hace justicia cuando quien está encargado de hacerla es quien la incumple. Cuando el encargado de hacer las leyes es quien las hace favorables a sus actuaciones ilegales, y los encargados de aplicarlas son los interesados en blindar sus actuaciones. La única justicia posible en este país, a día de hoy, viene del pueblo.