"El descenso del paro viene dado por la caída de la población activa", coincide Àngells Valls, profesora de la escuela de negocios ESADE. Valls también apunta a cómo el tipo de empleo, "de baja calidad", en el que se basa la mejora de la ocupación, presente un claro sesgo de género y edad: jóvenes y mayoritariamente hombres. Un perfil que "puede hacer mella en los que van a ir quedando atrás" en el mercado laboral, añade.