por mucho que se ruja, la realidad es la que es, hace unos días nos catalogaban entre los 20 países más democráticos del mundo en algún medio muy influyente.
que sea twitter no quiere decir que pueda uno soltar lo que quiera, ya ha habido otras condenas en sentido "ideológico" distinto pero no tienen tanto ruido mediático desde la izquierda, claro, para no desarmar el discurso preestablecido.