huzo dijo:
Entiendo que duela el gesto de Piqué, pero yo no lo veo recriminable (lo de Mou sí que lo veo hecho con mala leche)
Tiberiuz dijo:
O sea que... el gesto de Piqué es correcto porque el madrid ya lo ha hecho antes... ¿es así?
moshano dijo:
Entonces que no celebren los goles haciendo una piña que eso también ofende al rival...
A ver, que esto se está convirtiendo en un
Ultrasur contra
Boixos Nois:
Piqué se equivocó. El que Zamorano o San Pedro Bendito hubiera hecho eso antes no lo justifica. Se equivocó, y el primero que se lo dijo en el mismo campo fue Carles Pujol, que tiene diez años más de experiencia y un siglo más de sentido común.
Messi se equivocó también. Sí, Carvalho le sacudió (en su línes habitual), pero él hizo un teatro extraño en un jugador que ha recibido por todas partes y jamás se queja.
Guardiola se equivocó, y eso es menos justificable. Si el mismo gesto lo hubiera hecho Mourinho, dentro de dos semanas seguiríamos hablando de lo chulo y gilipollas que es el portugués. Pues eso.
Mourinho se equivocó, al prohibir hablar tras el partido a los jugadores. Como mínimo, Iker Casillas, como capitán del Real Madrid, tenía que haber salido ante la prensa y decir lo que todo el mundo había visto: que el Barcelona les pasó por encima, que la Liga sigue y es muy larga, y punto. Y no hubiera pasado nada.
Sergio Ramos se pasó diez pueblos. Está muy bien que ahora pida perdón, pero se le fue la olla de una manera que no se puede tolerar, y mucho menos ante compañeros de selección. Impresentable su actuación, incluso en un hombre que nunca ha tenido muchas luces.
Y Florentino Pérez también se equivocó. Está claro qye Jorge Valdano es el que tiene que lidiar con la prensa si se le requiere en estos partidos (y lo hizo), pero, en esta ocasión, tenía que haberse presentado él y aclarar que el partido había sido horroroso, sí, pero que se había fichado a Mourinho para un proyecto a largo plazo, que confiaba en el equipo, y que creía que, al final, el Madrid ganaría el título. Hubiera dado un apoyo necesario a la plantilla y hubiera quedado claro que la institución tiene un presidente al frente.
Al final, la cosa estuvo clara: el Barça jugó el mejor partido que se le recuerda y el Madrid no pudo con ellos. Y se acabó. Ni uno ni otro han ganado nada todavía, así que esto puede quedar al final como un hecho decisivo o una mera anécdota. En mayo lo veremos.