Hombre, hay que verla con ojos de su época. De lo contrario es como acusar a Tino Casal de hortera.
Anyway, yo creo que trasciende (ahora me contradigo; hey, lo mismo SÍ soy gilipollas!!) su añada y que tiene suficiente good stuff como para disfrutarla hoy día... Aunque sólo sea por los FX de Stan Winston merece revolcón.