Terminado el Cinema Purgatorio: Código PRU de Garth Ennis.
No tenía ni puta idea de qué era esto de cinema purgatorio, si era una nueva colección, una nueva editorial, un nuevo comic,... pero los que me conocéis ya sabéis lo que suele pasarme con Ennis (coño, mirad a la izquierda), asi que en cuanto vi su nombre ahí al lado del de Raulo Cáceres se vino para casa.
Luego ya indagué un poco, al parecer esto de Cinema purgatorio fue una iniciativa de Alan Moore por kickstarter para editar un serial en el que distintos autores publicaran capítulos cortos de historias mas largas y todo fuera en el mismo paquete, algo como lo que existiía hace decadas en EEUU (no recuerdo el nombre del serial, pero era de ciencia ficción, alguno lo recordareis).
A parte de los tomos numerados y regulares está este que recopila todos los capitulos de Ennis (el niño bonito de Moore), me cogí el 1 de la serie regular y este Codigo Pru.
Capitulos efectivamente cortitos, pero me encanta el formato. En un blanco y negro precioso, en cuanto abres el comic no hace falta que metas la nariz para olerlo (como hace cualquier lector
de bien) , enseguida te viene ese maravilloso olor a tinta, y Raulo Cáceres usa muy bien la tinta, los que le conocemos sabemos que no suele dejar mucho espacio en blanco, todo está sobrecargadísimo y exageradísimo y en algunos casos la proporción humana que utiliza es muy particular, soy amante de los diseños exagerados, que le vamos a hacer. Y verle otra vez despues del Crossed Psicópata pudiendo dibujar criaturas como las que aparecen es la hostia.
Me ando por las ramas, el comic en sí: Pru es una chica que empieza en el servicio de ambulancias de Nueva York, y ya en su primera noche se da cuenta de que las cosas no son como esperaba: al parecer el mundo está plagado de seres mitológicos y aterradores, como hombres lobo, vampiros, momias, zombies,... y cada uno de ellos lleva un tratamiento de urgencias distinto. A través de capítulos cortitos (unas 5 paginas cada uno) Ennis hace su habitual crítica a todo sistema de control establecido y se permite desarrollar personajes y crear un mundo bastante interesante. Una pena que no sea autoconclusivo, pero estaremos atentos para el siguiente.
Es la única etapa que yo conozco, además de la de La cosa del pantano de Moore, que es donde Constantine apareció por primera vez. Delano mola bastante, al menos en los dos primeros tomo recopilatorios de ECC, retrata muy acertadamente la Gran Bretaña ochentera y deja para la posteridad algunos números muy buenos. Joder, si ya en la primera trama, esa del demonio del hambre y el amigo yonki de Constantine, ya están claras las líneas maestras del personaje.
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