Y es lo que digo. Ha sido un ataque tan histérico y poco razonado, que cualquiera con más tablas, se la hubiera comido por los pies y la hubiera noquedado con facilidad. Pero Ortega Smith se pone nervioso, se aturulla, se pone a sudar como un cerdo, y no da pie con bola, saliéndose por los cerros de Úbeda y dando una pésima imagen a su partido. Lleva su guión aprendido, y como lo saques de ahí o lo ataques frontalmente, lo anulas.
A VoX se le nota demasiado la falta de experiencia y que hasta hace nada eran un partido con dos gatos que en consecuencia no han sido capaces de atraer (por ahora) a gente de valía. Si por ejemplo, hubieran captado a Javier Nart, y esta loca le suelta lo que le ha soltado a Ortega, se va del plató llorando y pidiendo la baja voluntaria. Garantizado.