Mis abuelos tuvieron 7 hijos, con un único sueldo de fontanero de aquel entonces.
Y vivir se podía. Ni pasaban hambre, ni vivían en chabolas. Vivían en una casa pequeña, de dos plantas, y tenían coche propio, y se iban de vacaciones de verano a la playa. Eso sí, eso de salir de vacaciones era estricta y exclusivamente, una vez al año, las cosas (coche, nevera, tele) duraban 20 años y no se cambiaban por capricho o por salto tecnológico, ni por obsolescencia programada, y a los 14 años, todos los hijos fuera del colegio y a trabajar, nada de mantenerlos mientras estudian, y caprichos, los justos, y todo lo que se podía, se heredaba entre hermanos en vez de recomprarse.
Eso, hoy es imposible, el paradigma de lo que es la vida ha cambiado, ya no se estila una vida ahorrativa y humilde, sino una de vivir al día y privarse de lo menos posible.