Yo creo que estamos mezclando un montón de cosas y algunas muy complejas. Va un tochete...
La cosa es que, actualmente, en nuestra sociedad occidental la obesidad es un problema importantísimo (tenemos una abundancia de comida como no ha habido nunca en la historia, los intereses económicos de la industria inundan el mercado con una oferta muy poco saludable, el estilo de vida de la ciudad es pésimo (sedentarismo, estrés...) y existe una tremenda presión social para ajustar nuestro cuerpo a unas referencias casi imposibles...). Todo eso ha llevado a que la gente, mucha gente, demande adelgazar y tener un cuerpo estupendo. Adelgazar se ha convertido en un negocio escandaloso. En consecuencia cada vez crece más el mundo de las clínicas de adelgazamiento, las dietas (milagrosas o no), las cirugías estéticas o de la obesidad, la industria de la alimentación (que también quiere sacar partido de esta parte negocio) y los gimnasios...
Por otro lado la investigación médica en relación con la nutrición es compleja y el conocimiento avanza, como en muchos otros campos, de una forma algo confusa de tal forma que alimentos que antes considerábamos malos ahora son buenos y al contrario. Todo ello sumado a la gran dificultad que entraña demostrar mediante una investigación seria (método científico) cualquier intervención y más si se hace sobre poblaciones y de forma preventiva. Si a esto le sumamos algunas modas exóticas y una difusión de la información brutal gracias a internet tenemos el panorama actual. Montones de propuestas sobre dietas y patrones nutricionales para mejorar nuestra salud, alargar nuestra vida, adelgazar sin esfuerzo... Cada dos por tres sale información sobre algún super alimento (aguacate, quinoa, semillas de Chia o de lino...), complementos nutricionales (de las clásicas vitaminas y minerales a proteínas de diversos orígenes) o alimentos nocivos para la salud (azucar, trigo, sal, grasas trans, todos los hidratos de carbono...).
Es complicadísimo separar el grano de la paja y valorar que información viene avalada por un conocimiento y unos ensayos metodológicamente válidos.
En el momento actual creo que la mejor dieta que se puede recomendar apoyada por un ensayo clínico metodológicamente válido es la dieta mediterranea:
Si os fijáis propone en la base algunas recomendaciones que tienen que ver con el estilo de vida: actividad física diaria, descanso adecuado y convivencia, asi como una ingesta abundante de agua que garantice un adecuado estado de hidratación. También recomiendan la frugalidad y el respeto por los hábitos locales y las costumbres.
Aqui más información:
FUNDACIÓN DIETA MEDITERRANEA
Esta recomendación podrá cambiar en un futuro si avanza nuestro conocimiento, pero de momento es asi. ¿significa eso que ser vegetariano, por ejemplo, es malo o que otras dietas pueden ser malas? NO, de esas otras dietas faltan estudios sólidos que nos permitan hacer una recomendación similar a la que se hace con la dieta mediterranea, pero si parece claro que hay mucha gente haciendo dietas diferentes y no parece que estén enfermando y muriendo todos los días. Ventajas de ser omnívoros y de que nuestro metabolismo es capaz de compensar muchos desequilibrios.
Por mi parte creo que lo ideal es seguir una dieta variada, tendente a la frugalidad y no a los excesos, donde se eviten al máximo la comida procesada/industrial llena de productos químicos, con exceso de sal y azucar. La orientación de la pirámide que he puesto, incluídas las recomendaciones de estilo de vida, pueden ser muy útiles.
Si lo que quieres es adelgazar tendrás que cambiar el estilo de vida que te ha llevado a engordar o si no, estarás continuamente en el proceso de engordar-adelgazar con un desgaste físico y psicológico insufrible. No es difícil ver qué hábitos han llevado a la obesidad. Lo difícil es cambiarlos de forma sostenida en el tiempo. En el momento de adelgazar habrá que aumentar el ejercicio físico y reducir la ingesta. De esta manera la inmensa mayoría de la gente podrá adelgazar de forma saludable. Algunas personas, de forma excepcional, siguiendo este patrón no lo conseguirán y necesitarán consultar con un profesional para descartar algún problema de salud asociado. Sin embargo la mayoría de la gente (algunos por falta de conocimiento, pero no todos) prefiere consultar (y pagar) a un profesional para que le oriente en el proceso de adelgazar. Somos libres. El problema suele venir después, para mantenerse en el peso y la razón es evidente: si no cambias el estilo de vida volverás a donde estabas antes. Lógico.
Y en relación a los profesionales dejo aqui también mi punto de vista:
La endocrinología es una especialidad de la medicina que trata las alteraciones del sistema endocrino y metabólico, donde están las enfermedades hormonales (diabetes, hipo e hipertiroidismo, insuficiencia suprarrenal, etc, etc.) que pueden estar estrechamente relacionadas con el metabolismo y, por tanto, con la nutrición. Al fin y al cabo, la nutrición es una pequeña parte de la especialidad, aunque algunos endocrinos la han convertido en su medio de vida principal. Todos los médicos han estudiado endocrinología y tienen conocimientos sobre metabolismo y nutrición. Algunos médicos tienen bastante abandonados esos conocimientos en su práctica habitual porque en su especialidad o subespecilidad no son necesarios, pero para otros muchos el consejo nutricional forma parte de su profesión cotidiana, aunque suele estar en relación con las patologías que atiende (el cardiólogo al enfermo coronario, el nefrólogo a sus pacientes con insuficiencia renal, el médico de familia a sus hipertensos, el intensivista con su pacientes críticos, el pediatra con los problemas de crecimiento, los alergólogos, etc. etc. Todo esto vale como ejemplo, no es una relación exhaustiva).
Luego están los dietistas-nutricionistas, que son profesionales sanitarios con titulación universitaria (Diplomados o Graduados
Universitario en Nutrición Humana y Dietética. Su tarea tiene que ver siempre con la nutrición: junto a los médicos asesorando la alimentación de personas enfermas como parte del tratamiento, junto a la industria, en la investigación, docencia, divulgación y educación pública relacionada con la prevención y promoción de la salud mediante la alimentación. Entre todas estas funciones destaca la más conocida que es la del dietista clínico que actúa sobre la alimentación de una persona sin la intervención de ningún médico. Esta gente estudia y trabaja "full time" en el tema de la alimentación y la nutrición asi que yo creo que pueden estar perfectamente capacitadas para hacer un buen consejo nutricional para mejorar la dieta, corregir desequilibrios, adelgazar de forma saludable, etc, etc.
Por tanto yo creo que ambos profesionales, endocrinólogos y nutricionistas, tienen la formación adecuada para hacer un buen consejo nutricional. Es cierto que, en el caso de que exista alguna enfermedad, será el médico el que tenga más herramientas para su tratamiento, pero también es verdad que cada vez la tendencia es que los problemas de salud se aborden de una forma multidisciplinar implicando a distintos profesionales y especialistas. Creo que lo importante no es solo el título sino que sean buenos profesionales. También aclaro que yo no pagaría por un consejo nutricional. Creo que la información necesaria para seguir una nutrición saludable está disponible sin necesidad de pagar. La dificultad no es tener el conocimiento, sino hacer el esfuerzo de aplicarlo.
Perdón por el tocho. Perdón por mi excepticismo hacia los profesionales de la nutrición, los inconvenientes del pan (el trigo, los hidratos de carbono y tantas otras cosas) en la dieta y lamento también que se haya colgado ese video porque casi parece más un chiste que un plantemiento médico serio. Saludos!!