Si es posible, creo que es mucho más limpio no mezclar sistemas operativos en un único disco duro, y eso lo dice uno que normalmente es lo que hace...
Hoy he cogido de conejillo de indias el equipo de la oficina, un Lenovo ThinkCentre A52 con:
- Procesador Intel Pentium D 820 a 2.8 GHz.
- Chipset Intel 945G Express
- Tarjeta gráfica Intel GMA950 integrada
- 1 puerto IDE en el que tengo conectada una regrabadora y un disco duro IDE de 120 GB
- 2 puertos SATA de los que tengo uno ocupado con un disco de 80 GB SATA
- 4 GB de RAM a 533 MHz en dos módulos de 2 GB.
Y me he dicho, en este equipo tiene que funcionar Leopard sí... o sí. Así que me he puesto manos a la obra.
Y como no he querido correr riesgos, he desconectado el disco duro del equipo y le he pinchado otro disco duro igual. Los pasos, los de siempre:
1. Arranque del DVD de Kalyway 10.5.2,
2. Arrancar la utilidad de discos para formatear el disco en HFS+ con registro y formato MBR.
3. En las opciones de personalización de Kalyway, le he indicado que me instale los drivers de la GMA950
4. Dejarle instalar...
En unos veinte minutos estaba funcionando el sistema operativo en versión 10.5.2 con todo perfecto. Reinicio, apagado, tarjeta de vídeo con soporte Quartz Extreme (QE) y Core Engine (CE), tarjeta de audio tanto en salida como en entrada... perfecto vamos.
Seguido le he metido el Kalyway 10.5.3 update, como siempre:
1. Instalar el update y NO reiniciar.
2. Instalar la actualización del kernel sin seleccionar kernel alternativos.
Nuevo reinicio, comprobación rápida y todo funciona a la perfección, así que he ido a por la última actualización 10.5.4 a través de las actualizaciones de Apple...
... Y se jodió. El sistema ha entrado en un bucle de reinicios, pero nada que no se pueda arreglar. Cuando aparece el boot de Darwin pulsamos F8 para elegir las opciones de boot y seleccionamos "update -v" y el sistema entra correctamente. He descargado un programa llamado OSxTools en
http://pcwizcomputer.com/osx86tools/ y me ha permitido instalar un kernel alternativo, tras lo cual el sistema ha funcionado a la perfección.
Cuando lo he tenido a mi gusto y he comprobado que todo funcionaba, he conectado el otro disco al segundo puerto SATA. Las BIOS actuales permiten gestionar cual de los discos queremos que sea el de arranque, asi que para elegir si quiero Windows XP SP3 o Mac OS X sólo tengo que pulsar F12 al arrancar el equipo y me aparece un menú para elegir el dispositivo de arranque. Lo tengo configurado para que por defecto sea el disco de Windows pero puedo elegir al arrancar otro dispositivo.
Esta forma me parece mucho más limpia, tienes garantizado ausencia de problemas y cada sistema operativo funciona con su gestor de arranque particular. Si tienes la posibilidad de tener dos discos, creo que es la mejor.