Pues yo vería perfectamente normal que la gente de Oviedo destrozara las placas de la Plaza Primo de Rivera.Y aún peor, ¿qué derecho tenían a colocar en su lugar placas nuevas, todo ello sin pedir permiso? Pues si le ofendía, que presentara un escrito a la comunidad; tan "mal" está una cosa como la otra.
El ejemplo no encaja ni meditando. Las placas de calles que están pegadas en las fachadas pertenecen a los ayuntamientos y no a las comunidades de la fachada donde se encuentre esa placa.
Lo siento pero no. Un ciudadano no va por ahí rompiendo mobiliario urbano, estatuas, exposiciones o simples plantas.Todo tiene sus cauces salvo que seas un anti sistema ...
Un abrazo!
Es mas, no concibo como puede haber calles todavía con estos nombres.