Roland Garros 2006
Después de un triunfo de ensueño ( sólo Mats Wilander había ganado
RG en su debut ) cabía la posibilidad de pensar en qué tipo de campeón se convertiría Nadal .
¿ En alguien que se conforma con haber ganado una sola vez, como Moyá? En un campeón que por las lesiones y el infortunio se queda con 1 solo título cuando debería haber ganado más , como Ferrero ? En un doble ganador como Bruguera?
Lo cierto es que su temporada de tierra batida dejó poco lugar a las dudas: Nadal igualó sus resultados de 2005 ganando Montecarlo y Roma. En los dos casos se enfrentaría a Federer en la final, y en el caso del foro itálico con un partido épico de casi 5 horas de partido y salvando dos bolas de partido ( en aquellos tiempos las finales de Masters 1000 , que no era la denominación oficial áun, se jugaban al mejor de 5 sets )
Madrid aún no era un torneo de tierra batida, sino rápida y además indoor ( por cierto, lo ganó en 2005 ) pero para compensar esa ausencia ganó el torneo de Conde de Godó en Barcelona, como hizo el año anterior. Con estos antecedentes, parecía clara su concidión de favorito... pero había dudas.
No había disputado ni el
Abierto de Australia por lesión . De hecho, ni siquiera había jugado la copa Masters de 2005 . Las lesiones han sido una compañera de viaje del mallorquín desde el comienzo de su carrera, algo no deseado pero que ayuda a explicar la encomiable actitud con la que ha desarrollado su carrera deportiva. La abnegación, el sacrificio, la entrega han sido herramientas que se ha visto obligado a desarrollar hasta el punto de hacer de ellas casi un arte , pero motivadas en buena parte por la guerra interna que ha padecido.
Tambien nos da una pista sobre la prioridad con la que él y su equipo han organizado su calendario y recuperación: no han dudado en sacrificar torneos de pista rápida en favor de la arcilla, siempre con la vista puesta en el Open francés.
Así se presentaba en París, y así empezó: derrotando a Vilas. Si. Al mítico Guillermo Vilas le arrebató el récord de victorias en tierra consecutivas en tierra ( 53 ) al ganar en primera ronda a un tal Robin Soderling . Es fascinante repasar los cuadros y encontrar precedentes de futuras rivalidades y guiños del destino . Mas adelante coleccionaría víctimas ilustres: su antiguo ídolo y ex nº1 mundial Lleyton Hewitt ( el rey del tenis mundial de la generación inmediatamente anterior a la suya, depuesto de su trono por Marat Safin y a este de manera fulminante y definitiva por Federer ) , un bisoño Novak Djokovic ( demasiado acostumbrado a retirarse de los partidos en los que perdía de manera clara ) y a Ivan Ljubicic que le dio muchos menos problemas aquí que en la pista rápida gris de Madrid.
La final era por primera vez contra Federer. Anteriormente solo se habían visto las caras en semifinales o en finales de torneos 1000 ó 500 como el de Dubai ( que ganó Nadal ) o Miami ( que ganó Federer )
Su trayectoria hasta la final había sido impecable: solo el chileno Massú le había puesto en algún aprieto al ganarle un set en tercera ronda y David Nalbandian al obligarle a remontar tras adelantarse en el primer set el de Mar del Plata ( terminaría abandonando por lesión ) . En este partido Federer se sacó el mejor punto del torneo con una
genialidad irrepetible.
La final arrancó con un Federer imperial, retratando a un desubicado Nadal con un contundente 6-1. Un correctivo de primer orden , al que había que sumar otro hecho: el público iba descaradamente con el suizo, francoparlante y objeto de las simpatías de los parisinos. Ante un panorama así cabría pensar que un tenista que ya ha ganado ese torneo y que tiene enfrente al mejor jugador del mundo en ese momento ( ese mismo 2006 ganó los otros 3 Grandes sin mayores complicaciones ) y al público en contra, se podría haber dejado ir del partido o al menos tomarselo con algo de calma, dejando discurrir el segundo set para ver qué pasaba...
Eso sería lo que pasaría por mi mente.
Por la de Nadal pasó esto: 1-6.
Con el partido empatado, todo era cuestión de ver de qué parte se decantaba el ritmo de juego, y lo cierto es que estuvo todo muy igualado. Yo creo que fue la final de RG que mas cerca estuvo Federer de ganarle a Rafa . El 4-6 y 6-7 final demuestra lo ajustado que estuvo todo, aunque tambien creo que Nadal siempre lo tuvo mas o menos controlado ( todo lo controlado que te puede dejar tenerlo un genio como el suizo) . Roger empezaba a pensar que se le complicaba sobremanera su aspiración de ganar el Grand Slam con este demonio zurdo de ojos pequeños salido de una isla remota al que no había manera de meterle mano, y seguramente maldeciría el no haberse tomado mas en serio el torneo de 2004 cuando el cuadro era mas asequible y cayó eliminado ante un Gustavo Kuerten ya en decadencia.
Con su 2º
RG consecutivo Nadal ya había despejado una incógnita. Él no era Moyá ni Costa. Era como mínimo del club de Bruguera. Pero solo era el inicio, a partir de ahí, le tendrían que comparar a ellos con él.