Lo de la represión es de un cinismo inigualable; deben pensar que todos los que les votan son imbéciles, y que da igual lo que digan.
El gobierno español ha aplicado el artículo 155 de la Constitución, tan legal como los otros 168, tarde y a regañadientes, porque no le quedaba otra alternativa. Recordemos:
Artículo 155
1. Si una Comunidad Autónoma no cumpliere las obligaciones que la Constitución u otras leyes le impongan, o actuare de forma que atente gravemente al interés general de España, el Gobierno, previo requerimiento al Presidente de la Comunidad Autónoma y, en el caso de no ser atendido, con la aprobación por mayoría absoluta del Senado, podrá adoptar las medidas necesarias para obligar a aquélla al cumplimiento forzoso de dichas obligaciones o para la protección del mencionado interés general.
¿Qué esperaban? Se pasan por el forro las leyes catalanas y españolas, se cachondean de las advertencias del Tribunal Supremo, declaran la independencia unilateralmente... y ahora se echan a llorar por los niveles de represión del estado. Estos no han visto en su vida lo que es un estado represor. Si esta actuación se hubiera producido en cualquier otro país civilizado como Estados Unidos, Alemania, Francia, estarían todos, no seis, en la cárcel para muchos años. En América igual no hubieran llegado ni a poder ingresar en la prisión, visto cómo se lo toman algunos patriotas allí.
Al final de la I Guerra Mundial un general norteamericano tuvo una bronca con el general John J. Pershing, al mando de las tropas estadounidenses, por firmar el armisticio y no continuar la guerra hasta llegar a Berlín. Pensaba que los alemanes, a pesar de estar hundidos, no se considerarían derrotados y volverían a las andadas en cuanto se recuperaran. El tiempo le dio la razón.
Estamos en el mismo caso. Como los jueces no apliquen la ley y los cabecillas de este intento de golpe de estado no vayan a la cárcel, estaremos en la misma situación en poco tiempo, pero esta vez sabiendo que los independentistas se habrán preparado mejor y desconociendo quienes formarán el gobierno español que deba pararles los pies.