Artur Mas ahora quiere ser bombero
Ha sido muy entretenida, y a la vez luminosa, la visita que ha hecho
Artur Mas a
El divan de Sílvia Coppulo (TV-3).
Sílvia hace una sesiones muy pintorescas. Es experta en el arte de la coctelería. Mezcla bien los géneros. Por ejemplo, cuando entra un poco en el terreno
del corazón, con temas personales, con ese punto de suave cursilería añadida que tan bien funciona en la tele, en esos tramos intimistas de la conversación. Fue impagable cuando le puso aquellas colosales imágenes de
Michelle Pfeiffer cantando recostada sobre el piano de
Los fabulosos Baker Boys. ¡Ah!
Mas se quedó turulato unos momentos. Y exclamó con una sinceridad muy hermosa:
«Le voy a decir una cosa, Sílvia, si un día me encuentro con la Pfeiffer, ¡no me hago responsable de lo que pueda pasar!». ¡Ahh! Teniendo fama de ser un político frío, transpiraba una irrefrenable pasión.
Al margen de estas pinceladas tan entretenidas, cuando
Sílvia inició el abordaje político fue todavía más iridiscente. A pesar de quedarle todavía seis o siete meses de inhabilitación,
Mas hablaba como un político en plena acción. Hubo un momento delicioso, cuando haciendo un ejercício de realismo que es de agradecer, advirtió:
«Todavía no nos podemos separar de España legalmente. ¡Está demostrado que no estamos separados de España!». ¡Ahh! Este ataque de franqueza, que le sobrevino de pronto, fue luminoso. Sobretodo por haberlo dicho en TV-3, cadena que lleva tiempo hablando del
Estat espanyol como si fuera una cosa así como Zimbabue o Angola, países de otro continente. Hasta en el servicio meteorológico le prestan más atención a una
calamarsada en Bélgica que a un catastrófico temporal en Tafalla o en Pamplona.
Otro momento muy disfrutable fue cuando
Sílvia le preguntó qué hacer ante la dificultad de
Pedro Sánchez para acceder a Presidente. Contestó:
«Hablar con PSOE, Podemos, PNV... Para evitar que gobiernen España los otros, esos otros que vendrían a Catalunya con las cerillas '¡a calar foc!'». ¡Ahh! Esta alusión al tripartito PP-C’s-Vox, dibujados como agentes de la fábrica de cerillas La fosforera española ha sido muy buena. Es curioso. Muchos analistas políticos coinciden en que fue
Artur Mas quien encendió el
procés, en el 2014. Luego perdió el control del incendio. Y pasó lo que pasó. ¡Ahh! Aquel que fue pirómano, ahora resulta que quiere ser bombero. Celebrémoslo.
Artur Mas ahora quiere ser bombero
Memorable Ferrán Monegal
PD Un recordatorio conveniente .. de un lector acidamente da en el clavo
¿Saben que a raíz de los incidentes de 2011, cuando no dejaban a Más llegar al Parlamento y tuvo que acceder en helicóptero, con incidentes diversos, la Audiencia Nacional sólo multó a uno de los 19 acusados por violencia? ¿Y que posteriormente Más y Homs, así como las instituciones catalanas, no conformes con la sentencia, recurrieron al Supremo? ¿Y que éste rectificó y condenó a 3 años a parte de los encausados, reconociendo la violencia que la simple actitud pasiva provocaba, para regocijo de los miembros del Gobierno de Cataluña? ¿Y sabe quién era el ponente en el Supremo, que tan contentos dejaron a Más y compañía, el mismo que ahora está bajo sospecha de los independentistas, el magistrado Marchena.¡ Que cosas tiene la vida!