Qué pena de elecciones, qué pena de resultados y qué pena de políticos. Seguiremos mucho tiempo dando vueltas al mismo molino sin avanzar hacia ningún sitio, me temo.
Media Cataluña queriendo una independencia prometida como el cumplimiento de la gran ilusión, aunque sin una verdadera hoja de ruta, sin mucha claridad en el cómo se haría y con grandes dudas sobre la viabilidad del nuevo estado. Y otra media que no quiere la independencia porque prefiere seguir en España y en Europa. Y, mientras tanto, el partido que gobierna en España con mayoría absoluta, sigue perdiendo votos y respaldo a sus planteamientos alli donde hay elecciones. Su forma de "no responder" a los problemas de la gente sigue siendo un ejemplo de lo que no hay que hacer y en las generales veremos si se confirma esta tendencia. Será interesante.
Con todo, una de las cosas que más me sorprenden es la diversidad en los planteamientos sociales de los que defienden la independencia. Veo muy complicado que se pueda construir algo coherente juntando a la Convergencia de Mas con ERC y la CUP. Y para colmo todo apunta a que Mas no va a tener el apoyo necesario para ser President y se irá a Canadá a disfrutar, de forma transitoria, de un retiro dorado pagado por Grifols, hasta que la justicie lo reclame para rendir cuentas por la corrupción sistémica de su partido y su gobierno. ¡Qué lamentable es todo!
A los que vivís en Cataluña os compadezco. Si todo esto se hace pesado viviendo en Madrid, no me lo quiero imaginar alli. Cuánto me gustaría que cambiaran nuestros gobiernos y nuestros políticos estuvieran al servicio de los problemas de la gente!! Pero nosotros aqui seguimos con la Cifuentes y su PP en la Comunidad y vosotros con esa banda de Convergencia, incomprensiblemente unida a ERC, vendiendo humo y construyendo el día de la Marmota (próximas elecciones en 5,4,3,2...). Con esta gente nada va a cambiar
A ver qué pasa con los ayuntamientos de Madrid y Barcelona y si es posible que algo nuevo y mejor llegue por este camino, que todavía está por verse. A ver qué pasa en las próximas generales... Pero vamos, que me hago pocas ilusiones ya. La democracia y las mayorías sospecho que apostarán por continuar igual o muy parecido... Hay suficiente bienestar para que no cuaje una verdadera revolución. Somos una sociedad acomodada y que acepta de buen grado la corrupción de sus gobernantes. Nada cambiará.