Lo pongo aquí mismo:
Hoy, a la salida del curro, a las 21:00 como hago muchas noches me pongo a escuchar la radio. Todavía me suelo poner Hora 25, excepto aquellos días donde hablan del Sida en el Tibet y ya no me interesa tanto. Entonces me pongo La Brujula. Pero a excepción de los lunes, donde hay tertulia con políticos, ese tramo horario se dedica a entrevista, reportaje monotemático sobre algún asunto y hoy han tocado los secretos oficiales.
Hablaban con historiadores, abogados, hablando de la situación de nuestro país respecto a los países de nuestro entorno en materia de archivos clasificados.
A todo esto, el viernes pasado hablaron de un libro en formato charla que se ha escrito con el historiador Ángel Viñas, que lleva algunos años investigando la Guerra Civil. El hombre se quejaba de no poder acceder todavía a miles de documentos españoles sobre el conflicto (militares, políticos, grabaciones) y cotejarlos además con los que ha ido descubriendo de archivos privados o de otros países, que si tienen sus archivos al respecto accesibles.
Aquí hay miles de documentos de la Guerra Civil que en primer lugar, posiblemente no estén ordenados y clasificados para su estudio, y en segundo lugar no se ha hecho nada para enmendar esa carencia.
Pero, comparaban también con lo que ocurre en otros países, donde los documentos públicos, debidamente manejados con las precauciones propias de no desvelar fuentes y otros datos que siguen teniendo algún tipo de connotación a la Seguridad Nacional, son liberados al cabo de veinticinco o treinta años. Por lo tanto, documentos relativos al 23F deberían estar accesibles si fueramos una democracia garantista. Como estamos lejos del nivel democrático de otros países, lo del 23F parece que esta parcelado a cincuenta años, pero eso no garantiza el acceso.
La ley de Secretos data de 1968. No se si en los ochenta hubo una pequeña modificación, según recuerdo de mis tiempos de estudiante. Es de lo más arbitrario que existe, ya que el Consejo de Ministros decide que es Secreto y que no, y decide si se hacen públicos o no a voluntad, sin ningún tipo de regulación al respecto que hable de periodos ni nada parecido. También estaba la Junta de Jefes de Estado Mayor, pero... ya no existe ese órgano. Los intentos de cambio de la Ley, han sido para hacerlas más restrictivas.
Pero no es lo más grave que tenemos al respecto. Hablaban también del caso de las fichas de investigaciones policiales y demás... En otros países, la investigación debe estar abierta y accesible a la defensa en juicios. Aquí no tenemos esa opción. Y por lo tanto la justicia adolece de garantías y deja de ser justicia. De igual modo ocurre con asuntos en investigación como la Caja B del PP, donde el conjunto de la sociedad es parte afectada e interesada, pero aquí todo se oculta más allá de lo que saquen los medios de las ordenes judiciales, etc.
En fin, dejo aquí esa parte del programa porque me ha parecido bastante interesante.
http://www.cadenaser.com/espana/aud...guardados/csrcsrpor/20140403csrcsrnac_65/Aes/
Puestos a pulir, no pulamos lo gordo.
