La rencorosa despedida de un rey 'maltratado': «Los enemigos de España son los españoles»
«Si fuesen extranjeros los enemigos de su dicha, entonces, al frente de estos soldados tan valientes como sufridos, sería el primero en combatiros; pero todos los que con la espada, con la pluma, con la palabra agravan y perpetúan los males de la nación son españoles, todos, invocan el dulce nombre de la patria, todos pelean y se agitan por su bien»
«Grande fue la honra que merecí a la nación española eligiéndome para ocupar su trono; honra tanto más por mi apreciada, cuanto que se me ofreció rodeada de las dificultades y peligros que lleva consigo la empresa de gobernar un país tan hondamente perturbado»
"Lejos de centrarnos en sus bondades físicas, Amadeo de Saboya fue un militar que demostró su valor en batalla en repetidas ocasiones. Ya fuera en la batalla de Custozza allá por 1866 (donde una herida en el pecho le valió la Medalla de Oro al Valor Militar); ya fuera en la Marina (en la que ingresó en 1868 en calidad de vicealmirante). Tampoco andaba escaso de cultura, pues había viajado por medio mundo (España inclusive) y se había reunido con otros tantos líderes europeos"
"Pero su llegada a España le deparaba una triste sorpresa: la muerte del general Prim, su principal valedor, durante el conocido atentado en la calle del Turco de Madrid. Aquel fue el comienzo de un reinado marcado por el desaire y el rechazo del pueblo. De nada valió que Amadeo acatara las responsabilidades constitucionales y que se dedicara a fundar escuelas, hospicios y asilos. El preso de sustituir a los borbones fue demasiado. A todo ello se sumaron, como bien señalan ambos autores en sus respectivos dossieres, las intrigas políticas en su contra de buena parte de los partidos políticos."
Enviado desde mi SM-N910F mediante Tapatalk