nogales
Miembro habitual
Buenas, abro este post para hacer una recopilación de las que creemos que son las peores obras de directores de cabecera.
Quedando bien claro que el paradigma a seguir sería el Indiana Jones IV de Spielberg, y dando también lugar a un debate:
¿ Son mejores las peores obras de cineastas con un discurso propio o películas objetivamente buenas pero de directores sin criterio a los que le sonó la flauta ese día ?
La diferencia entre una y otra muestra sería que en el primer caso, aún resultando una obra frustrante, puedes encontrar en ella ecos que te dirigan y orienten dentro la filmografía de ese autor, mientras que en el otro extremo ves una obra sin resonancia.
Y una vez dicho esto, paso a enumerar algunas :
Tim Burton- El planeta de los simios
Errática en su pretensión de ubicar la cinta desde un punto de vista histórico-medieval. Burton no es un discursista moral, es un poeta pictórico y se le nota que la historia se le va de las manos y el referente anterior le queda muy grande y se termina comiendo al remake.
David Lynch- Dune
Ejemplo del director engullido por el proyecto, incapaz de superar las dificultades de una gran supeproducción y sobre todo de combinar su narrativa subyacente con un film mainstream, y todo ello respetando la obra de Herbert.
Ni el diseño de producción luce como debiera por múltiples errores de confusión entre los directores artísticos ,el director de fotografía ni el libreto se adapta al recorte de la duración ni funciona la voz en off mental ni la capacidad de Lynch para ensoñar, por lo confuso de por sí del universo.
Joel & Ethan Coen- Crueldad intolerable
El afán por redefinir los géneros clásicos de los hermanos se ve cortado en seco por la pareja protagonista, que no entendió demasiado bien qué clase de película estaban haciendo y que termina siendo tan superficial como los films a los que tratan de parodiar.
Martin Scorsese- Infiltrados
Un despropósito total en cuanto a referencias, mensajes, motivaciones, conclusiones, estilos, etc
Marty no sabe a dónde quiere ir y terminamos en tierra de nadie, sin saber qué nos han querido contar. Algo impensable en el director de obras tan concisas como Toro salvaje.
Michael Mann- Ali
Un guión que no te permite ver dentro del espíritu de su protagonista es un error imperdonable para un biopic. Sales de la sala sabiendo practicamente lo mismo del personaje en su faceta pública, y sólo la parte final en África muestra el poderío narrativo de Mann para retratar a personajes a través de los ambientes en los que se mueven.
Quedando bien claro que el paradigma a seguir sería el Indiana Jones IV de Spielberg, y dando también lugar a un debate:
¿ Son mejores las peores obras de cineastas con un discurso propio o películas objetivamente buenas pero de directores sin criterio a los que le sonó la flauta ese día ?
La diferencia entre una y otra muestra sería que en el primer caso, aún resultando una obra frustrante, puedes encontrar en ella ecos que te dirigan y orienten dentro la filmografía de ese autor, mientras que en el otro extremo ves una obra sin resonancia.
Y una vez dicho esto, paso a enumerar algunas :
Tim Burton- El planeta de los simios
Errática en su pretensión de ubicar la cinta desde un punto de vista histórico-medieval. Burton no es un discursista moral, es un poeta pictórico y se le nota que la historia se le va de las manos y el referente anterior le queda muy grande y se termina comiendo al remake.
David Lynch- Dune
Ejemplo del director engullido por el proyecto, incapaz de superar las dificultades de una gran supeproducción y sobre todo de combinar su narrativa subyacente con un film mainstream, y todo ello respetando la obra de Herbert.
Ni el diseño de producción luce como debiera por múltiples errores de confusión entre los directores artísticos ,el director de fotografía ni el libreto se adapta al recorte de la duración ni funciona la voz en off mental ni la capacidad de Lynch para ensoñar, por lo confuso de por sí del universo.
Joel & Ethan Coen- Crueldad intolerable
El afán por redefinir los géneros clásicos de los hermanos se ve cortado en seco por la pareja protagonista, que no entendió demasiado bien qué clase de película estaban haciendo y que termina siendo tan superficial como los films a los que tratan de parodiar.
Martin Scorsese- Infiltrados
Un despropósito total en cuanto a referencias, mensajes, motivaciones, conclusiones, estilos, etc
Marty no sabe a dónde quiere ir y terminamos en tierra de nadie, sin saber qué nos han querido contar. Algo impensable en el director de obras tan concisas como Toro salvaje.
Michael Mann- Ali
Un guión que no te permite ver dentro del espíritu de su protagonista es un error imperdonable para un biopic. Sales de la sala sabiendo practicamente lo mismo del personaje en su faceta pública, y sólo la parte final en África muestra el poderío narrativo de Mann para retratar a personajes a través de los ambientes en los que se mueven.