'La actitud “No Problem ' Destrucción Garantizada
por Gary North
La mayoría de la gente no cambiará. Demasiado radical. No ir con la corriente. No apostar contra la manada.
Los mejores ejemplos en el siglo XX fueron los judíos en Alemania en 1933. Se quedaron. Incluidos los banqueros judíos, todos los cuales podrían haberse marchado. Pensaron que podrían hacer un trato con Hitler. No leyeron el Mein Kampf. No se lo tomaron en serio.
Aproximadamente el 7 % se marchó pronto: 38,000 de 523,000. Más se fueron después de 1938. Hacia 1941, aproximadamente 160,000 quedaban en Alemania. Entonces la emigración fue cerrada por los Nazis. Antes,la habían animado. Los datos están ahí.
A cierto precio, casi todos podrían haberse marchado. Había países que los habrían dejado entrar. Eso sí, habrían tenido que aprender un nuevo idioma. Habrían llegado en la pobreza. Pero los judíos habían afrontado esas opciones desde el cautiverio en Asiria en el octavo siglo aC. ¿Y qué?
No todos habrían escapado de los Nazis. Unos se habrían ido a otros países europeos que luego fueron invadidos por Alemania después de 1939. Pero podrían haber tratado de escaparse. Y se quedaron. Se negaron a ver las señales de advertencia. " No puede ser tan malo", decían. Pero fue peor.
Los judíos tenían una respuesta para el pesimismo. "No problem. Podemos controlar esto"
Los armenios pasaron por el mismo trago. Las matanzas turcas de 1895 eran un anticipo. La mayoría de los armenios se quedaron Entonces vino el genocidio de 1915.
¡NO PROBLEM!
Mirad cómo estaba la economía en octubre de 2007. El Dow estaba en 14.000. Los bancos prosperaban a tope. Los bienes inmuebles estaban un poco preocupantes, pero los expertos no dieron ninguna advertencia. Se equivocaron. Todos ellos.
El gobierno estadounidense afronta 1,8 millones de millones de dólares de déficit este año. Los ingresos fiscales federales han bajado un 34 %, lo que quiere decir que el déficit será de más de 2 millones de millones de dólares. Nadie se preocupa. Nadie dice, " Esto es el fin. La economía americana nunca volverá a ser como era. "
Pensad: "2007". ¿Habías imaginado que Chrysler y General Motors (GM) llegaran ambos en bancarrota? En octubre de 2007 las acciones de GM estaban a 43 dólares. Ahora una acción vale 1 dólar. Había una industria llamada “banca de inversión”: Bear Stearns, Lehman Brothers y Goldman Sachs no formaban parte del sistema bancario comercial. Para sobrevivir, unos cuantos hicieron la transición en septiembre de 2008. Algunos no hicieron recortes.
Merill Lynch desapareció. El Banco de América y Citigroup fueron avalados por el gobierno. Habrían desaparecido. Se venden por una fracción de por lo que se vendían en 2007.
¿Y qué dice la mayoría de la gente? "No problem"
No hay ningún problema para el cual su respuesta no sea "no problem."
La asistencia médica quebrará. La seguridad social quebrará. "No problem."
La tasa de paro sigue creciendo. "No problem."
Cuando la gente se niega a afrontar la realidad, porque la realidad va a ser más dolorosa que cualquier otra cosa que hayan experimentado, buscan señales de que losproblemas que no pueden evitar sin cambios no son tan malos. Buscan buenas noticas que lo compensen.
Creen que volverá el status quo anterior. El gobierno de los EUA va a gastar otros $ 30 mil millones para comprar el cadáver de otra empresa. Ya se ha gastado $ 20 mil millones. “No problem”.
Al principio se dijo a los accionistas que se necesitarían un 90 % de votos favorables para autorizar esto. El gobierno ha cambiado las reglas. Antes de la votación por los accionistas determinará qué porcentaje valdrá para aprobar esto. “No problem”.
La empresa nunca volverá a ser lo que fue. “No problem”. La gente no comprará tantos coches como antes a una empresa dirigida por el gobierno y los sindicatos. “No problem”.
El Dow subió 100 puntos con el rumor de que los mayores accionistas aceptarían el trato. El trato es un desastre, pero los inversores están en tono de “No problem”. De algún modo, así se maquilla la liquidación.
¿Quién va a comprar un coche de GM en vez de uno japonés? Aquí hay una empresa que está a punto de romper sus contratos con miles de sus concesionarios. “No problem”. Y sin embargo se espera que los compradores se fíen de la garantía de GM.
Oldsmobile desapareció. “No problem”. Pontiac desapareció. “No problem”. Cadillac vende sus coches con un anuncio de tipo flash pisando el acelerador. ¡Qué fuerte! La empresa cree que la gente con dinero no verá lo que hay detrás de este anuncio. Cadillac ha perdido el norte. “No problem”.
La relación precios/ganancias del Standard & Poor 500 está por encima de 120. Tradicionalmente, 20 se consideraba una venta. El inversor paga $ 120 con la esperanza de que la acción retendrá un dólar de ganancia y pagará algún porcentaje mínimo de estas ganancias como dividendos. “No problem”.
Observamos que el mundo de la inversión adopta una mentalidad de lemingo que siempre ha dado pérdidas. “Esta vez es diferente. No problem”.
LA CONFIANZA DEL CONSUMIDOR
La “Conference Board” The Conference Board - Wikipedia, the free encyclopedia anunció que la confianza de los consumidores está en 55. El número 50 es la neutralidad. Sin embargo la confianza de los consumidores es históricamente un indicador anticuado. Cuando sube, la bolsa suele caer.
El indicador es un reflejo de lo que la bolsa ha hecho recientemente. Usar la confianza de los consumidores como justificación para comprar acciones es una tontería. Es como decir: “Compraré acciones porque el público tiene confianza, lo cual sucede cuando las acciones han subido”. Si esa estrategia funcionara, la bolsa nunca dejaría de subir.
Incluso los lectores de avisos sobre dinero duro están empezando a dudar si las buenas noticias recientes no serán en realidad noticias malas “menos malas que lo esperado”. Esta es la clase de sueños que no se hacen realidad.
Los lectores miran los informes, y los informes parecen feos: precios de casas cayendo, desempleo creciendo, un déficit federal astronómico. Pero los medios dicen que estamos cerca del fondo -el fondo de un crash que ninguno de ellos había vaticinado.
Los lectores piensan: “para los niveles de finales de 2007, lo que estamos viendo diariamente era inconcebible”. Los optimistas hablan de una recuperación lenta, débil. Los pesimistas hablan de hiperinflación y depresión simultáneamente. Pero mientras el coro proclama “No problem”, el público repite despreocupadamente esta letanía.
“¡No tenemos nada que temer sino... el propio miedo!”. Sin embargo, mientras Franklin D. Roosevelt decía estas palabras, Hitler consolidaba su poder en Alemania, Stalin empezaba las purgas, una cuarta parte de la fuerza de trabajo en los EUA estaba desempleada. Pero Roosevelt empezó la letanía: “No problem”. Cuatro años después, el desempleo era todavía del 20 %. El déficit federal había subido como un globo. Los días felices no volvieron.
Tus amigos no quieren oír tu pesimismo ya más. No quieren cambiar. Se negarán a cambiar.
En 1934, Ludwig von Mises se percató de que Hitler, un austríaco, trataría de meter a Austria bajo hegemonía alemana. Avisó a los economistas judíos que se fueran. Habían sido alumnos suyos en un famoso seminario en Viena. Fritz Machlup le creyó, y se fué a los EUA. También Haberler. Mises se fue a Suiza como profesor, dejando detrás su estupenda biblioteca personal. Voló a EUA en 1940, después de la caída de Francia. Nunca volvió a conseguir un puesto de profesor a tiempo completo.
Unos pocos escucharon. La mayoría no. “No problem”.
¿OÍR? NO OIRÁN.
La gente se piensa los costes de hacer un cambio. Esto es sabio. Jesús enseñó:
“¿Porque cuál de vosotros, para construir una torre, no se sienta antes y calcula los costes, si tenemos suficiente para terminarla? Menos felizmente, después haber puesto los cimientos, y no poder seguir, y que empiezan a burlarse de él, diciendo, 'Este hombre empezó a edificar, y no pudo acabar'. ¿O qué rey, que va a la guerra contra otro rey, no se sienta primero y consulta si va a ser posible con diez mil hombres y encontrarse con que el otro tiene veinte mil? O más bién, mientras el otro está todavía lo bastante lejos, manda un embajador y desea condiciones de paz? (Lucas 14:28-32).
En resumen, calcula los costes. Esto es lo que la gente se niega a hacer. Han calculado el coste de hacer algo radical. Y es elevado. Han calculado el coste inmediato de no hacer nada nuevo. Y parece bajo. Así que prefieren no hacer nada.
Pero, ¿qué pasa en el largo plazo? Veamos:
1 Jubilaciones (sin Seguridad Social ni asistencia medica)
2 El déficit federal ($ 1,8 millones de millones este año)
3 La base monetaria de la Reserva Federal (doblada)
4 Caída de los precios de las casas
5 Aumento del paro
6 La guerra de Afganistán (para siempre, hasta nuestra derrota)
“No problem!”
¿Cómo razonas con esta gente? Respuesta: no razonas, si valoras tu tiempo y tu privacidad. Si resultara que te equivocas, te ridiculizarán o por lo menos te tratarán de infantil. Si tienes razón, te odiarán. Te pedirán dinero. Si eres cristiano, te dirán que no tienes corazón. Serás una línea de crédito para aquellos cuyo mantra era el “No problem!”.
No quieren cambiar. No cambiarán. No te escucharán.
Y cuando las cosas estén mucho peor que lo que predicen la mayoría de los noticiarios, te odiarán. ¿Estás dispuesto a esto?
¿Tienes un plan realista para lo que obviamente es un desastre en marcha: creciente apropiación por los gobiernos, déficits masivos, paro creciente, caída de precios de las casas, pensiones de jubilación reventadas, tasas de interés en aumento (caída de los bonos corporativos), e inflación de la Reserva Federal a una escala nunca vista en la historia de los EUA?
¿O crees que tú puedes retrasar esto? “No problem!”.
CONCLUSIÓN
Vivimos en el mundo de hoy. Es malo, pero no es una catástrofe. Debemos mantener la cabeza fuera del agua.
Viene un tsunami. En este escenario, debes salir del agua y fuera de la playa. Pero poca gente lo hará, a menos que hayan visto un tsunami. Pocos lo han visto.
Coloca un tanto por ciento de tus posesiones fuera del alcance el tsunami. Hazlo silenciosamente. No discutas con el bocazas de tu cuñado.
Piensa: “General Motors en octubre de 2007”.
Piensa en Chrysler, Merrill Lynch, y Lehman Brothers.
Nadie lo vio venir. Y vino.
Problemas. Grandes, grandes problemas.