MEGALOPOLIS / Coppola vuelve a gastar dinero. Proyecto épico.

Tv Show Television GIF by El Hormiguero


No había caído. Dame una calada
 
Adam Driver, cada vez más se le está poniendo cara de MR.Bean
 
Ideaza:


Por cierto, ya la vi, me hubiese encantado ver la misma peli que Jabamiah, pero yo creo que sólo hay dos cosas en ella que merezcan realmente la pena: la imponente BSO de Osvaldo Golijov ... y la radiante presencia de Nathalie Emmanuel, de la que es imposible no acabar enamorado al finalizar la proyección.

Un saludete.
 
Viendo el irregularísimo y desconcertante acabado visual (que no sonoro, que es exquisito, y no me refiero solo a la música) del filme, empiezo a creer realmente que la mitad del presupuesto se fue en la maría que se metió tito Coppi pal cuerpo durante el rodaje ...

Un saludete.
 
Yo aplaudo los cojonazos de Coppola! Todo lo que dice @Jabamiah está ahí y no está de una manera rebuscada ni nada, no es una peli difícil de entender y es muy imaginativa. Con lo que Coppola salta al vacío es con la propuesta, nada menos que un peplum sci-fi y no dado a la acción sino a la filosofía. Acierta completamente con el tono, con un toque teatral, casi de grand guignol, que crea esa distancia de ficción con el espectador, lejos de los coñazos inmersivos de Villeneuve o Nolan, y le permite arriesgar más con la verosimilitud de la trama y la caracterización de los personajes. Y su sentido operístico está intacto.

Tiene planos y diseños buenísimos, el problema viene con alguna set-piece (el Coliseo) en que el montaje tira demasiado de lo que se hace ahora, con exceso de tiros de cámara y cambios de plano, en general ese es su gran defecto, no poderse desprender de esa falta de rigor y de seguridad que hace que todas las películas sean como difusas, por eso ese tramo más movido tiene más un aire al Guilliam excesivo (otro con grandes ideas como Coppola) que a esas grandes escenas del Coppola de antaño.

La película funciona mucho mejor en las escenas más pequeñas, que son la mayoría, sobre todo las que involucran a la ciudad, tanto la real como la futurista. Las comparaciones con Cotton Club o Corazonada están bien traídas, con esa distancia de ficción que comento, entregándose mucho al género.

A veces se nota en exceso que está recortada, otro mal que ahora se nota más que antaño, pero a nivel estructural, como es bastante episódica, aguanta bastante bien.
 
Es una película muy amputada no? Eso se nota para mal en la segunda mitad. Y en su montaje algo esquizofrénico. Tendría que haber hecho lo de Lynch en The Return y hacer una película de 8 o 9 horas.

Aun así me encanta como lo que es, una reflexión sobre el tiempo, eso que le queda poco a Coppola, César puede detener el tiempo cuando quiera y obtiene ese poder de sus musas, pero el tiempo y su progresión son lo que lo impulsa a trabajar. Él ve esta gran civilización en decadencia y desea crear su propia utopía para que algo pueda sobrevivirlo a él y a la civilización. La arquitectura, el arte y la belleza congelan el tiempo, pero el artista no puede escapar de su marcha hacia adelante y aniquilación a la que el tiempo somete todo. La lucha de César con la pérdida es lo que lo inspira a crear su obra más importante. Lucha contra el tiempo al amar a alguien más y tener hijos, eso es lo que le da el impulso para completar su enorme proyecto.

Una película en la que pensé mucho mientras veía Megalópolis fue Rumble fish y esa película me vino a la mente porque Lawrence Fishburn da un monólogo sobre el tiempo en Megalópolis que es muy evocador del monólogo de Tom Waits sobre el tiempo en Rumble Fish.


Coppola reflexiona sobre su edad y su propia mortalidad; observa la sociedad desde su torre y la ve declinar; mientras desea construir algo duradero y hermoso para esta civilización desmoronada y dividida, su proyecto utópico de megalópolis es una metáfora de la película. Abraza secuencias episódicas en el espectáculo carnavalesco que a directores como Fellini les encantaba. Es casi como si cada elección que hizo aquí fuera para hacernos conscientes de lo que hay detrás de una película.

Y también es muy graciosa, y no creo que sea de forma involuntaria
 
Insisto, ojalá hubiese visto la peli que visteis vosotros :mutriste. Quizá si la vuelvo a ver más descansado y receptivo, le vea algo más, porque lo que sí recuerdo son momentos aislados de una peculiar belleza que hacen añorar otro enfoque.

Un saludete.
 
Es una película muy amputada no? Eso se nota para mal en la segunda mitad. Y en su montaje algo esquizofrénico. Tendría que haber hecho lo de Lynch en The Return y hacer una película de 8 o 9 horas.

Aun así me encanta como lo que es, una reflexión sobre el tiempo, eso que le queda poco a Coppola, César puede detener el tiempo cuando quiera y obtiene ese poder de sus musas, pero el tiempo y su progresión son lo que lo impulsa a trabajar. Él ve esta gran civilización en decadencia y desea crear su propia utopía para que algo pueda sobrevivirlo a él y a la civilización. La arquitectura, el arte y la belleza congelan el tiempo, pero el artista no puede escapar de su marcha hacia adelante y aniquilación a la que el tiempo somete todo. La lucha de César con la pérdida es lo que lo inspira a crear su obra más importante. Lucha contra el tiempo al amar a alguien más y tener hijos, eso es lo que le da el impulso para completar su enorme proyecto.

Una película en la que pensé mucho mientras veía Megalópolis fue Rumble fish y esa película me vino a la mente porque Lawrence Fishburn da un monólogo sobre el tiempo en Megalópolis que es muy evocador del monólogo de Tom Waits sobre el tiempo en Rumble Fish.


Coppola reflexiona sobre su edad y su propia mortalidad; observa la sociedad desde su torre y la ve declinar; mientras desea construir algo duradero y hermoso para esta civilización desmoronada y dividida, su proyecto utópico de megalópolis es una metáfora de la película. Abraza secuencias episódicas en el espectáculo carnavalesco que a directores como Fellini les encantaba. Es casi como si cada elección que hizo aquí fuera para hacernos conscientes de lo que hay detrás de una película.

Y también es muy graciosa, y no creo que sea de forma involuntaria


Totalmente, confronta su utopía en primera persona con la mediocridad política común y con el populismo oportunista, y lo hace con el modelo explícito de la decadencia del imperio romano y con el elemento sci-fi como motor para avanzar la historia. Es interesantísima.
 
Es más un ajuste de cuentas del autor con sus propios delirios, sueños y metas como cineasta que una realización plena de aquel proyecto imposible y demencial, una forma de darle salida por fin y que el resultado sea el que tenga que ser.

Sobre la base de una tronada combinación de intriga palaciega, toques de peplum, de noir, un concepto de sci-fi profundamente ingenuo y como de los orígenes del cine, es una película que parece hecha por un niño y por un viejo a la vez. Que se ofrece como una simple “fábula”, pero que se revela aparatosa, sobrecargada e histérica, con personajes a modo de puros moñigotes bufos, empezando por un Adam Driver sin el menor reparo a la hora de hacer el payaso y pasarse de rosca.

Tiene mucho de obra mutilada, renqueante, contada de manera atropellada, y aquí poca diferencia encuentro con lo que se estrena cada semana; otras veces sí que estamos ante una propuesta genuinamente bizarra donde Coppola despliega su denso, apretado texto visual cercano a lo vanguardista, con fundidos encadenados, multi-pantallas, una apuesta por mostrar el artificio y la tramoya de la ficción sin disimulo, eso cuando no nos lanza unas puntuales inmersiones en el delirio a modo de fugas (lo del circo, para mear y no echar gota) o incluso lo que podría ser un videoclip de Taylor Swift (para quienes le dicen abuelo cebolleta).

Tiene arranques de pura poesía naif (lo del andamio), pero en general me parece un film que cuando se pone íntimo y romántico cae en lo cursi, igual que cuando quiere ser grandioso sólo es grandilocuente y que cuando busca hacer gracia cae en la vergüenza ajena... uno tiene que decirlo.

Las supuestas reflexiones en torno a la historia y la decadencia de los imperios, con analogías a la Roma antigua, citas de Hamlet y las Catilinarias, off sentencioso, parodia de fascismos y populismos… me parece todo obvio, facilón, como el uso de ciertas músicas (la séptima de Beethoven… ¿Otra vez?). Subtramas como la del satélite de las que nunca más se supo, personajes-pegote que no parece que aporten gran cosa.

Nunca llegamos a saber nada concreto sobre qué es Megalópolis ni el proyecto de Cesar Catilina, más un elemento simbólico que otra cosa, relacionado con la cuestión (expuesta de manera machacona) del tiempo. El artista, genio, etc. que aquí es, en sentido amplio, creador, lo es con todas las letras. Es alguien no sólo con el don de parar el tiempo, sino de detener el tiempo estéril y agotado del devenir histórico, de su propia historia trágica personal, que sigue congelada en su memoria, para fundar (con la ayuda de su musa) su propio tiempo fuera del tiempo, en la eternidad. Ante semejante figura individualista, romántica, a la altura de un mesías, se interpone el conservadurismo de quien quiere mantener tal y como está aquello que se desmorona, antes que cortarlo de raíz para renovarlo. Pero el verdadero enemigo, ay, no es otro que las masas, ignorantes y susceptibles de ser manipuladas por cierta pareja que nos suena; el resentido bruto sin escrúpulos y la víbora sexualizada.

Y esa conclusión: una afirmación triunfante de sí, del cine, de la utopía, con la imagen tan significativa del recién nacido… y lo peor-mejor de todo, carente de cualquier ironía, o lo parece.
 
Hola, para mi es un no general.
Es un no porque no he conectado emocionalmente con ningún personaje y me parecen arquetípicos todos.
Es un no porque me parece un guión muy atropellado e irregular. Hay planos absurdos y escenas completas sonrojantes.
Es un no porque foto tampoco me ha gustado nada. Unida a los CGI´s o como lo hicieran esas cosas, me recuerda un poco a la saga Spy Kids
Es un no porque el diseño de producción es tan feo y anacrónico como la saga de los Juegos del hambre.

Es un si porque es una obra de una persona sin filtro. Pero es un no porque es una obra en la que el autor no le ha hecho caso a nadie.
 
Arriba Pie