Respuesta: Películas que vais viendo en casita
1919: Crónica del alba (Antonio José Betancor, 1983)
Segunda parte de 'Valentina', aquella curiosona película romántica infantil que protagonizase un Jorge Sanz de apenas 12 años, y que resultaba ser una adaptación de la obra homónima del escritor Samón J. Sender. Esta vez, el crío es ya un adolescente talludito con el rostro de Micky Molina
, dedicado a preparar potingues en una farmacia zaragozana, mientras en sus ratos libres trata de introducirse en ambientes anarquistas, al mismo tiempo que se zumba a todo un pibón (Cristina Marsillach y sus camisones transparentes
, felpudo incluido) y le escribe cartas de amor a su querida Valentina (angelical, aunque aún por desarrollar, Emma Suárez).
La peli no está mal, pero la pobreza de medios obliga a situar las escenas en callejones, patios y lugares cerrados. Aunque afortunadamente para la peli, en 1983 las localizaciones españolas aún conservaban ese aspecto sucio y desgastado típico del franquismo que tanto ayudaba a ambientar las películas en épocas pretéritas. En cualquier caso, es una pena esa falta de dinero y de visión por parte del director, porque la historia y los personajes daban para todo un 'Doctor Zhivago' a la española, quedándose finalmente todo el tinglado en un simpático capítulo televisivo (no en balde, produce TVE). Quizá, la mayor cagada de la película es la presencia de un Micky Molina cuyo personaje s está en las antípodas del crío repipi y descarado que vimos en la primera entrega. Aquí, José Garcés parece un pobre chaval tímido y bobalicón al que le ocurren las cosas por casualidad.
En fin, ojalá un día alguien se anime a ofrecer una visión verdaderamente épica de aquellos tiempos en el cine español.