Que pena que esto no lo hubiese hecho Polanski. Hasta aquí el dato más interesante de todo. Porque lo que es la peli es un tostón de tomo y lomo hasta llegar al meollo (y cuando llega te da todo igual, qué suplicio de peli, leñe). Es "La tormenta perfecta" de los volcanes. Un aburrimiento sumo donde no pasa nada, todo está más que requetevisto y con una estética digitaloide pegotazo (y lo poco que puede interesar huele a rebufo eructado de Gladiator). Cuando llega el volcán pues hay cierto esfuerzo por el espectáculo del cine catastrofista pero como que hay saturación y poca credibilidad (culpa de los actores, culpa de la dirección, culpa de la abuela, yo que sé). Encima el prota es una especie de Orlando Bloom con mirada acero azul y melenaza junto con ella que tiene cara de marciana. Sutherland gritando mucho para hacer ver que es el malote de la función y Trinity pasaba por aquí para cobrar el cheque. Y ya está, eso es todo. Anderson es mejor que te dediques a tus Andersonadas y dejes el cine épico para otros. A ti no te va y no te sale.