Yo creo que Samsung ha comprendido perfectamente lo que es el HDR en el hogar, y en ese sentido creo que habría que aplaudirles por ser más innovadores y transgresores, pues ellos sí que parecen haber entendido lo que supone llevar HDR al ámbito doméstico más allá de las directrices impuestas por las referencias, o sea, las normas. Ellos han entendido que la norma nace con algún handicap importante a la hora de visualizar HDR en salas de estar y salones convencionales, que es dónde se ubican principalmente las TVs de consumo, y es por ello que acertadamente deciden romper la susodicha curva levantando un poco el brillo medio para ofrecer un visionado HDR más acorde a lo que sería un ambiente propio de sala de estar, ya que de lo contrario, siguiendo fielmente la curva, la imagen sería más oscura, y eso Samsung no lo quiere porque sabe lo que buscan sus clientes y porque conoce los problemas potenciales del HDR de hoy en día en salas no perfectamente acondicionadas, que son el 99%.
Por eso creo que el argumento de esto o aquello es mejor o peor que lo otro simplemente por no seguir las directrices de la curva al pie de la letra me parece un argumento tan casposo como trasnochado y un tanto pasado de moda.
El HDR se tiene que ver correctamente, pero si se tiene que romper la curva ligeramente para una visualización con algo más de APL, pues se hace que no pasa nada, y por eso ni una tele es mejor ni peor que otra, simplemente se trata de dar una solución tan conveniente como convincente a sus clientes para el visionado HDR en condiciones normales.
Hasta Dolby Vision lo ha entendido y nos bombardea ahora con su marketing desde todos los sectores para anunciarnos a bombo y platillo su nuevo sistema...¡¡"Oh, Dolby Vision IQ"!! que no es más que otro sistema de contraste dinámico, solo que al llamarse Dolby Vision IQ da mucho más el pego.
Al final todas la teles tienen su propia trucología para de una forma u otra adaptar la señal HDR de manera automática a las propiedades de la pantalla, y lo hacen a base de contrastes dinámicos, tone mappings dinámicos y demás zarandajas, en un intento desesperado por luchar contra los problemas e inconvenientes que plantea la norma HDR en el ámbito del hogar y las limitaciones de las TVs de consumo actuales. O sea, tanto Samsung como LG tienen sus automatismos para procesar la señal HDR a nivel interno y ofrecer imágenes según sus criterios, en un intento por resolver los inconvenientes de la especificación en el hogar y de contentar a sus potenciales clientes ofreciendo una visualización HDR más adecuada.