Respuesta: Robocop 1-2-3
Que verdad es que a veces, la nostalgia te hace defender cosas casi agarrándose a clavo ardiendo sin saber que se está luchando por algo que ni puede defenderse ni merece la pena hacerlo.
(Id, Irvin Kershner, 1990)
Después del megataquillazo revienta taquillas que fue la primera, estaba cantadísimo que algo como Robocop iba a contar con una secuela. No tengo constancia de porqué rechazó Verhoeven realizarla (estoy convencido de que al primero que se lo ofrecieron fue a él) pero sus razones tendría. Creyendo conveniente que fuese Kershner el realizador tengo claro que creían tener al director apropiado. No es por nada pero estamos hablando del director de la mejor secuela hasta la fecha de la saga galáctica.
Frank Miller fue el encargado del guión pero según se dice aquello era imposible de trasladar a la pantalla así que lo dejaron en manos de Walon Green. Vista a día de hoy, Robocop 2 no tiene cura ni perdón. Está claro que quisieron explotar al máximo el potencial de un personaje producto como el hombre máquina pero vista a día de hoy está realmente envejecida, no tiene ritmo ni carisma. Personajes ultra planos, con unos esbirros que van de aquí para allá sin nada más que hacer que pegar tiros cual banda de serie Z (un niño como secuaz inteligente... de traca).
Son demasiadas incongruencias que por mucho que uno se esfuerce no logra salvarlas ni aún sabiendo que estamos en un producto destinado a cierta permisividad crédula. Pero todo está manga por hombro, no hay una acción contundente que haga sentirme cómodo y agusto. Violencia absurda, no por gratuita en sí sino porque no está bien rodada y sobre todo porque no tiene sentido cinematográfico, es un disparar al tuntun, con ganas de hacer explotar todo por los aires sin el más mínimo credencial de saber lo que se está haciendo y a raiz de ello acudimos a un espectáculo de feria barata, quizás demasiado, donde todo sucede per se, sin darle el enfoque apropiado para conseguir tener algo de ojos y cara.
La puesta en escena es extremadamente plana, no hay emoción, ni épica conseguida y sobre todo no hay nada que consiga empatizar con el Robocop que marcó un hito, un antes y un después. Con una misión indefinida y con la rídicula necesidad de darle motivos ¿humanos? para convertirlo en una barraca escupe frases impostadas, momentos cursis y ridículos como hacerlo convertirse en un padre para los niños violentos que deambulan por las calles no tiene perdón.
Si bien es cierto que no se puede negar que el producto, vía Orion, es un filme puro serie B, aún siéndolo intenta hacerse pasar por un producto con ojos y cara y puede que a principios de los 90 lograse colarnos el gol (conmigo funcionó a las mil maravillas) pero hoy día se le notan todas las fisuras posibles, sin un remiendo posible que logre salvar este estropicio. Con ideas tan originales como crear un Robocop con el cerebro de un yonki sin remedio, conseguimos uno de los villanos más estrambóticos, retazo y despojo de un cortador de cesped adulterado, chillón visualmente y poco creíble. Una animatrónica estupenda pero inservible.
Y si por esto fuera poco, la banda sonora intenta alejarse del tema fundamental de Basil Poledouris y lo único que consigue Leonard Rosenman es hacer una pieza aceptable pero desde luego sin la originalidad, épica ni matices de tamaña obra maestra. Si encima le añadimos esos coros innecesarios estamos ante uno de las bandas sonoras menos plausibles para mi gusto. Siento escribir esto pero desde luego al que escribe le parece que sabe a muy poco.
Robocop 2 intenta ser un punto y aparte, un título más heróico y hubicarlo dentro de un mundo de comic que huele a rancio, huele a decepción de la que no era consciente hasta hoy. Y yo defendiéndola como una secuela correcta cuando es de todo menos tal. Está claro que ver en escena al personaje tiene su acierto pero no para hacerlo deambular en una película que se ríe de sí misma y encima intenta que nos la tomemos en serio.
El tiempo, justamente, la ha puesto en su lugar, donde corresponde. Si pudiera la llenaba de Nuke y le prendía fuego. Me borro automáticamente del club de fans. Y lo más triste del caso es que la 3 hace de esta algo bueno. Que ironías de la vida.