Respuesta: Saga Regreso al Futuro - ¡ Qué fuerte, Doc, 25 años!
Ya iba siendo hora de ponerme de nuevo con esta magnífica saga (al igual que la de Alien).
(
Back to the future, Robert Zemeckis, 1985)
Si hay algo que queda por encima de todo lo demás no hay duda de que eso es el guión. Un guión tan bien elaborado, tan bien llevado y tan bien ensamblado que no le encuentro tara posible. Por más que lo mire y por más vueltas que le de al asunto, después de 25 años (que se dice rápido), el guión de Regreso al futuro es toda una clase magistral de como conseguir una historia compleja pero comprensible, una historia de viajes en el tiempo con elementos que en manos de otro podría haberse quedado fuera de juego pero que Zemeckis consiguió hacerlos usuales y convincentes. Dígase 1,21 Gigovatios, dígase Condensador de Fluzo y quedará cool (ya lo quedaba en su día).
Zemeckis consigue una historia de un montón de géneros comunes y en todos y cada uno de ellos la película funciona. Como comedia romántica es de lo más deliciosa, como película de aventuras es un despiporre, como cine de ciencia ficción es un lujo sin parangón. Y eso no se consigue de la nada. Cabezas pensantes, director en estado de gracia supino y un aroma Amblin que hace caer la baba a casi todo cinéfilo y espectador. Una película que se sigue con agrado, que no consigue decaer en ningún momento, manteniendo el interés y la atención por cada una de las pequeñas historias que pueblan esta maravillosa criatura cinéfila.
Con un reparto en su punto, un elenco que se convirtió en icono haciendo míticos a personajes tan dispares pero tan esenciales como la familia McFly, Doc Brown, Biff, el director Strekland, el alcalde Goldie Wilson, el perro Einstein... Estuvieron tan bien escogidos, tan bien interpretados, tan bien llevados que es una maravilla, una demostración de como un buen reparto consigue ensalzar una película. Lloyd y su histrionismo, Fox y su carisma, Thompson y su belleza, Glover y su patetismo... todos interpretan sus roles sin salirse de la ralla, con unos diálogos repletos de ingenio, humor, chispa y sobre todo consiguiendo frases impaglabes que es imposible no imaginar según qué escenas sin esas lapidarias palabras para tatuarse.
Pero no sólo la película funciona por su guión y por su elenco sigue siendo una obra maestra. Es por su puesta en escena, consiguiendo escenas perfectas una tras otra. Es como un dominó que cada ficha conlleva a la siguiente y todas bien orquestradas, confiriendo a la trama una magia increíble. La primera escena, donde Marty eleva hasta el infinito todos los altavoces, la presentación del Delorean y el paso al pasado (con esa magnífica canción "Mr. Sandman"), la interacción de Marty con sus padres, consiguiendo no interceder en el pasado para no cambiar el futuro (está tan bien dirigido que es creíble se mire como se mire), la persecución de Biff y sus esbirros por ese Hill Valley de los 50, la amistad que se procesan aquí y allí Doc y Marty (convirtiéndose en personajes icónicos), la mítica escena del Johnny B. Good (de lo mejorcito de toda la peli) o la realización del viaje al futuro, un prodigio de la narrativa, la realización y los efectos especiales (los cuales no son tantos como podría parecer pero que están tan bien orquestados que son un lujo).
En fin, que es imposible encontrarle un pero. Sólo uno. Y esa BSO. Una BSO que está orquestrada como las grandes BSO, dotando a cada escena de un estado y un acierto como sólo los grandes compositores pueden lograr. Y una integración de las míticas canciones de Huey Lewis que son una auténtica maravilla.
Esto y mucho más es Regreso al futuro. Y encima lograron un final de traca, que se creó como una (deliciosa) bacilada pero que dio pie a dos entregas más. Atemporal. Clásico por antonomasia. Nunca pensé que de un Delorean se pudiese sacar algo tan distinto, maravilloso y alucinante.
Pero que en este caso no hace falta. No la necesita.
