Respuesta: SCORSESE
El quiero y (extrañamente)
no puedo de Scorsese
Mira que lo intento, con todas mis fuerzas pero tristemente sigue sin convencerme. Los primeros minutos, hasta llegar al título de la película, cuando hemos visto la jugada de todos y cada uno de los personajes se me antoja algo que me demuestra que Scorsese sigue siendo el rey indiscutible de la mafia moderna, callejera, urbana, de verborrea mal hablada y de contundencia en el gatillo (o la maza, según se tercie).
Pero es ir avanzando y la película se me antoja muy forzada, como si no fluyese. Siento decir esto de un director que tengo en pedestal pero ya son 4 veces que la he visto y por extraño que parezca siempre tengo la misma sensación. Esto iba para ser algo grande y se quedó en el camino. Y mira que la película tiene apuntes y de los grandes. Momentazos los tiene, no soy tan ciego, pero que de haber sido una película homogenea, compacta, sin asperezas varias podríamos hablar de una continuación perfecta a su trilogía magistral (aunque hayan clamores que Casino no es más que un remake, yo no lo considero así) pero que a mi no me funciona ni me convence.
Whalberg soltando palabrotas a toche y moche sin parar ni un segundo a tomar el aire en un personaje que le valió la nominación al Oscar, Nicholson haciendo de sí mismo, disfrutando todos y cada uno de sus momentos pero que tristemente se me antoja un personaje cojo donde no veo otra cosa que "Nicholson haciendo de" y el duo dinámico entre un Damon correcto pero poco más y un Di Caprio que me convencen sus esfuerzos por destacar (y lo consigue en la mayoría de sus escenas pero no consigue convencerme en el conjunto de su personaje) pero no ofrece mucho más.
Fisicidad como a Scorsese le gusta, una violencia cruda como sólo él sabe plasmar pero una trama que se me antoja irregular junto con un metraje excesivo (2 horas y media son demasiadas para una historia que no necesita tanto, sinceramente) añadiéndole la historia / triángulo amoroso que no llega ni lleva a ningún sitio. A años luz de los mejores trabajos del maestro. Un título que en absoluto merecía los loores del premio a la mejor película del año (por mucho que Martin esté detrás) y acaba dejándome un sabor agridulce, donde el subrayado de la rata es innecesario (sólo le faltaba a la rata sacar un letrero a lo Coyote donde dijese "soy una simbología de la rata traidora") y aunque el momento decisivo en el ascensor es uno de los mejores momentos de la filmo de Scorsese, todo lo demás (redada - escena final) se me antoja demasiado rápido, como si no hubiese sabido calcular o equilibrar.
Quizás sea que es el cambio de siglo y las cosas se hacen así. Debe ser que soy más clásico de lo esperado, quien sabe. Pero que no me convence del todo como para aplaudirla como cabría esperar.