Estoy viendo que mi nuevo Sagar Hozkatua funciona tan, tan bien, que voy a acabar macOS como sistema operativo principal en lugar de Windows 10 Pro, así que estoy revisando todo el software que uso en Windows y buscando alternativas para macOS.
Prácticamente toda mi CDTeka la tengo en formato CD tradicional (Redbook) a 44.1kHz y 16bit, con cada uno de los temas del álbum separados en archivos individuales y organizados en una estructura de carpetas Género / Artista / [año] Nombre del Álbum / nn Título de la pista.
Mis CDs originales los he convertido a este formato usando ExactAudio Copy, y en macOS puedo hacer lo mismo con el programa XLD
El programa es muy personalizable y tiene un módulo de extracción del audio de los CDs muy bueno:
Pero de vez en cuando me encuentro con algún álbum antiguo que he descargado y que está en formatos diferentes al de FLAC o que no está dividido en archivos por pistas sino en un único archivo acompañado de un fichero .cue.
El último caso ha sido este maravilloso concierto de 1962 con el piano de Glenn Gould acompañado de la New York Philharmonic Orchestra dirigidos por Leonard Bernstein (atención a la introducción de Gould a cargo de Bernstein), que lo tengo en formato APE (Monkey Audio).
En estos casos, para procesar archivos .cue utilizo en Windows el programa Medieval CUE Splitter, y para macOS he encontrado una alternativa muy buena llamada Flacon.
flacon.github.io
Flacon hace todo con un solo clic, divide el archivo y lo transcodifica en formato FLAC. La transcodificación no supone ningún cambio en la calidad del audio ya que al igual que FLAC, APE es un formato sin pérdidas, y tan solo estamos comprimiendo los archivos con un compresor distinto. Igual que si estuvieramos cambiando de WinZIP a WinRAR.
Puedes decirle qué patrón quieres usar para darle nombre a tus archivos, en qué genero clasificarlos, darle nombre al artista, al álbum... es muy completo.
Y solo hay que pulsar el botón convertir para que el proceso se ponga en marcha
Y terminas con tus archivos perfectamente organizados en sus carpetas, y separados en formato FLAC
Como los guardo en una carpeta supervisada por Audirvana, que es mi reproductor favorito, ya solo me queda abrir el programa y disfrutar de la música reproducida con la mejor calidad.
Mejor en una ventana minimalista, solo con la cubierta del álbum, para no despistarnos y centrarnos en la música. La toma de sonido no es la mejor y cerca del micro hay alguien que no para de toser durante la actuación, pero hay que disfrutarla.
He descubierto este concierto leyendo el libro Música, Solo Música, de Haruki Murakami, una delicia que recoge las conversaciones entre el escritor y el director Seiji Ozawa.