Hinomura Krycek
Bayofilo
Mi WAT conoce a Mark Hamill. 
Star Wars y todo su universo
- Autor Atreyub
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Pos mi parienta se fue a cenar con Darth Vader.
toooma
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Yo soy Mark Hamill y mi mujer también!
Peter Jackson
Pizza Time Dude!
A 20 € cobraba la firma Anthony Forrester y Julian Glover este finde pasado en la CIFICON...
El retorno del Jedi
Con “El retorno del Jedi”, el director Richard Marquand retoma la historia empezada en “El Imperio contraataca” (Irvin Kershner, 1980), con Luke, Leia Organa (Carrie Fisher), Chewbacca (Peter Mayhew) y Lando Calrissian (Billy Dee Williams) en una misión para rescatar a Han Solo (Harrison Ford) de las garras del lord del crimen Jabba el Hutt. Por otra parte, el Imperio Galáctico ha vuelto a construir una nueva Estrella de la Muerte con la que pretenden aniquilar de una vez por todas a la Alianza Rebelde, y para asegurarse de ello Darth Vader supervisará la construcción de la estación espacial junto al Emperador (Ian McDiarmid). En esta ocasión, el sentido de la aventura vuelve a primar por encima del drama y nos encontramos con una producción en la que predomina la presentación de cuantas más criaturas extravagantes por encima de los personajes, y en la que un tono ligero se sobrepone a una película cuya historia principal esta bañada por un manto fatalista.
Es una contradicción que se cierne durante toda la película y que se ramifica en todos sus aspectos, empezando por el guión coescrito entre Lawrence Kasdan y George Lucas. En rasgos generales, a parte de una voluntad de recuperar un interesante sentido de la aventura, predominan dos tramas en la película, una principal que sigue a Luke en su sino para enfrentarse contra Darth Vader, sabiendo ahora quien se esconde bajo el casco; y otra con Han Solo como líder de un escuadrón para infiltrarse en una base secreta. La primera es la que guarda toda la carga dramática y de la que poco se le puede achacar, pues tanto las situaciones como los diálogos resultantes fluyen con naturalidad y desarrolla con perfección el conflicto vivido y, si en “El Imperio contraataca” se profundizó en el lado luminoso de la Fuerza, aquí somos testigos de las intrincaciones del lado oscuro a manos del Emperador. Se genera un conflicto a tres bandas en el que cada personaje lucha por sus propios intereses y cada uno de ellos sobresale por la característica que le define. En esta parte destaca la creación del Emperador, haciendo lo imposible al presentar a un personaje todavía más siniestro y retorcido que Vader. Es un personaje maquiavélico y omnisciente, poseedor del control sobre todo lo que sucede a lo ancho y largo de la galaxia.
Por otra parte, Han queda relegado aquí como un personaje que cae en un punto intermedio entre héroe de aventuras y comparsa cómico. Aunque no hay ningún problema en ser un héroe aventurero, la película guarda una serie de escenas rocambolescas que tienen entre poco y nada de sentido, y que viene precedido por una secuencia inicial en la que la gratuidad se eleva como adjetivo definitorio. En dicha secuencia solo destacan las presentaciones de Jabba y de Luke Skywalker, quien sufre las consecuencias de las heridas recibidas al final de “El Imperio contraataca”; porque por todo lo demás, el desarrollo de la acción solo se puede tildar de torpe. Por desgracia, no es más que una presentación de lo que vendrá a continuación hasta llegar al emocionante clímax. Sin embargo, peor parado queda Han como personaje, pues se desdibuja su personalidad al darle rasgos azucarados, celosos e incluso enclenques; en detrimento de su carácter original de pícaro. Poco se puede decir del resto de personajes, dado que a Fisher le sucede algo parecido a Ford y Lando simplemente pasa por allí. Afortunadamente, los robots C-3PO y R2D2 siguen teniendo buenos momentos y aguantan por pura fuerza de carisma.
“El retorno del Jedi” tiene un peligroso equilibrio entre lo bochornoso y lo espectacular, la comedia infantilizada y la tragedia griega; y junto con esto, también hay momentos memorables seguidos de momentos que rompen todo el sentido de la incredulidad. A la dirección de Marquand se le echa de menos más épica y sensación cinematográfica, y su trabajo queda un tanto rudimentario, por no decir televisivo. Se fuerzan escenas en las que se denota una puesta en escena que se acerca más a la comedia familiar que al drama que pide la historia, y retrae parte de la seriedad que surgen de los conflictos. Por suerte, el film encuentra finalmente su lugar en un clímax en el que se desarrollan hasta tres tramas paralelas en las que todos los departamentos siguen una misma dirección: la de ofrecer espectacularidad y dramatismo a partes iguales; si bien es cierto que en una de esas tramas se falla levemente por motivos que van más allá del guión. Si hay algo especialmente destacable en el final son los efectos especiales creados por la Industrial Light & Magic, quienes a lo largo del desarrollo de la película ofrecen momentos visuales interesantes y memorables, pero no es hasta la secuencia final donde el virtuosismo de los técnicos estalla en un festival audiovisual que consigue transmitir la desesperación de las situaciones, ayudado, eso si, por la memorable partitura de John Williams. A parte de recuperar temas emblemáticos de la franquicia como la fanfarria inicial o “La Marcha Imperial”, crea una canción melódica con “Luke & Leia”, tema principal de la película; compone tres suites llenas de dinamismo, dramatismo y tenebrismo tituladas “La batalla de Endor I”, “II” y “III”; escribe una partitura dedicada al místico tema de la fuerza titulado “Light of the Force”, y concluye la película con una composición que ha cambiado con el paso del tiempo, una de tonos tribales para la versión original y otra con un tono más agridulce pero esperanzador para la reedición en VHS del 1997.
Para muchos, la franquicia de Star Wars murió con el estreno de “Star Wars: Episodio I – La amenaza fantasma” (George Lucas, 1999), y para otros esto sucedió directamente con “El retorno del Jedi”, cuando las intenciones empresariales de Lucas empezaban a ponerse por encima de las cinéfilas. Y es muy comprensible dado el cambio de tono (e intenciones) con respecto a “El Imperio contraataca”, película que terminaba con una nota pesimista. “El retorno del Jedi” es, en definitiva, una película para niños con pequeñas dosis trágicas guardadas para una confrontación final con unos niveles dramáticos que llegan francamente tarde, hecho que se agrava al venir precedido por un primer acto innecesariamente largo; y un segundo acto irregular. Sin embargo, la película encuentra su éxito en una aventura que nunca aburre, varios momentos memorables, un último tercio espectacular, unos actores y personajes que, según cual mejor o peor caracterizados, perduran hoy en día como unos de los más emblemáticos que ha ofrecido el cine; y todo ello viene acompañado además por unos rompedores efectos especiales y una espléndida banda sonora del maestro John Williams.
Con “El retorno del Jedi”, el director Richard Marquand retoma la historia empezada en “El Imperio contraataca” (Irvin Kershner, 1980), con Luke, Leia Organa (Carrie Fisher), Chewbacca (Peter Mayhew) y Lando Calrissian (Billy Dee Williams) en una misión para rescatar a Han Solo (Harrison Ford) de las garras del lord del crimen Jabba el Hutt. Por otra parte, el Imperio Galáctico ha vuelto a construir una nueva Estrella de la Muerte con la que pretenden aniquilar de una vez por todas a la Alianza Rebelde, y para asegurarse de ello Darth Vader supervisará la construcción de la estación espacial junto al Emperador (Ian McDiarmid). En esta ocasión, el sentido de la aventura vuelve a primar por encima del drama y nos encontramos con una producción en la que predomina la presentación de cuantas más criaturas extravagantes por encima de los personajes, y en la que un tono ligero se sobrepone a una película cuya historia principal esta bañada por un manto fatalista.
Es una contradicción que se cierne durante toda la película y que se ramifica en todos sus aspectos, empezando por el guión coescrito entre Lawrence Kasdan y George Lucas. En rasgos generales, a parte de una voluntad de recuperar un interesante sentido de la aventura, predominan dos tramas en la película, una principal que sigue a Luke en su sino para enfrentarse contra Darth Vader, sabiendo ahora quien se esconde bajo el casco; y otra con Han Solo como líder de un escuadrón para infiltrarse en una base secreta. La primera es la que guarda toda la carga dramática y de la que poco se le puede achacar, pues tanto las situaciones como los diálogos resultantes fluyen con naturalidad y desarrolla con perfección el conflicto vivido y, si en “El Imperio contraataca” se profundizó en el lado luminoso de la Fuerza, aquí somos testigos de las intrincaciones del lado oscuro a manos del Emperador. Se genera un conflicto a tres bandas en el que cada personaje lucha por sus propios intereses y cada uno de ellos sobresale por la característica que le define. En esta parte destaca la creación del Emperador, haciendo lo imposible al presentar a un personaje todavía más siniestro y retorcido que Vader. Es un personaje maquiavélico y omnisciente, poseedor del control sobre todo lo que sucede a lo ancho y largo de la galaxia.
Por otra parte, Han queda relegado aquí como un personaje que cae en un punto intermedio entre héroe de aventuras y comparsa cómico. Aunque no hay ningún problema en ser un héroe aventurero, la película guarda una serie de escenas rocambolescas que tienen entre poco y nada de sentido, y que viene precedido por una secuencia inicial en la que la gratuidad se eleva como adjetivo definitorio. En dicha secuencia solo destacan las presentaciones de Jabba y de Luke Skywalker, quien sufre las consecuencias de las heridas recibidas al final de “El Imperio contraataca”; porque por todo lo demás, el desarrollo de la acción solo se puede tildar de torpe. Por desgracia, no es más que una presentación de lo que vendrá a continuación hasta llegar al emocionante clímax. Sin embargo, peor parado queda Han como personaje, pues se desdibuja su personalidad al darle rasgos azucarados, celosos e incluso enclenques; en detrimento de su carácter original de pícaro. Poco se puede decir del resto de personajes, dado que a Fisher le sucede algo parecido a Ford y Lando simplemente pasa por allí. Afortunadamente, los robots C-3PO y R2D2 siguen teniendo buenos momentos y aguantan por pura fuerza de carisma.
“El retorno del Jedi” tiene un peligroso equilibrio entre lo bochornoso y lo espectacular, la comedia infantilizada y la tragedia griega; y junto con esto, también hay momentos memorables seguidos de momentos que rompen todo el sentido de la incredulidad. A la dirección de Marquand se le echa de menos más épica y sensación cinematográfica, y su trabajo queda un tanto rudimentario, por no decir televisivo. Se fuerzan escenas en las que se denota una puesta en escena que se acerca más a la comedia familiar que al drama que pide la historia, y retrae parte de la seriedad que surgen de los conflictos. Por suerte, el film encuentra finalmente su lugar en un clímax en el que se desarrollan hasta tres tramas paralelas en las que todos los departamentos siguen una misma dirección: la de ofrecer espectacularidad y dramatismo a partes iguales; si bien es cierto que en una de esas tramas se falla levemente por motivos que van más allá del guión. Si hay algo especialmente destacable en el final son los efectos especiales creados por la Industrial Light & Magic, quienes a lo largo del desarrollo de la película ofrecen momentos visuales interesantes y memorables, pero no es hasta la secuencia final donde el virtuosismo de los técnicos estalla en un festival audiovisual que consigue transmitir la desesperación de las situaciones, ayudado, eso si, por la memorable partitura de John Williams. A parte de recuperar temas emblemáticos de la franquicia como la fanfarria inicial o “La Marcha Imperial”, crea una canción melódica con “Luke & Leia”, tema principal de la película; compone tres suites llenas de dinamismo, dramatismo y tenebrismo tituladas “La batalla de Endor I”, “II” y “III”; escribe una partitura dedicada al místico tema de la fuerza titulado “Light of the Force”, y concluye la película con una composición que ha cambiado con el paso del tiempo, una de tonos tribales para la versión original y otra con un tono más agridulce pero esperanzador para la reedición en VHS del 1997.
Para muchos, la franquicia de Star Wars murió con el estreno de “Star Wars: Episodio I – La amenaza fantasma” (George Lucas, 1999), y para otros esto sucedió directamente con “El retorno del Jedi”, cuando las intenciones empresariales de Lucas empezaban a ponerse por encima de las cinéfilas. Y es muy comprensible dado el cambio de tono (e intenciones) con respecto a “El Imperio contraataca”, película que terminaba con una nota pesimista. “El retorno del Jedi” es, en definitiva, una película para niños con pequeñas dosis trágicas guardadas para una confrontación final con unos niveles dramáticos que llegan francamente tarde, hecho que se agrava al venir precedido por un primer acto innecesariamente largo; y un segundo acto irregular. Sin embargo, la película encuentra su éxito en una aventura que nunca aburre, varios momentos memorables, un último tercio espectacular, unos actores y personajes que, según cual mejor o peor caracterizados, perduran hoy en día como unos de los más emblemáticos que ha ofrecido el cine; y todo ello viene acompañado además por unos rompedores efectos especiales y una espléndida banda sonora del maestro John Williams.
Hinomura Krycek
Bayofilo
Muy de acuerdo. Te has dejado a los ewoks... 
JohnDoe
Tó lo gordo y tó lo negro
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Te has dejado los ewoks y el tema de los ewoks en el apartado musical. Que de todas formas los ewoks se llevan todos los palos pero siempre fueron el menor de los problemas de la película. La trama Luke/Vader/Emperador muestra por dónde podían haber ido los tiros (y aún así opta a veces por lo torpe, como cuando Luke se reencuentra con su padre y espera reconvertirlo en dos frases), pero desgraciadamente El retorno del Jedi se quedó como una especie de simulacro "barato" de lo que debería haber sido la auténtica resolución de la saga. Los defectos son gravísimos y más numerosos cada vez que lo analizas: el prólogo de Jabba se hace demasiado largo (y aburrido a tramos) y el parque de inquilinos de su palacio queda muy lejos de la credibilidad que hasta entonces habían tenido las criaturas de Star Wars; la resolución de la relación Leia/Luke queda chapucera y anticlimática (las revelaciones se hacen totalmente a destiempo); los nuevos mundos que aparecen se quedan en sólo uno (Endor), que carece de capacidad de sorpresa/fascinación; el recurso a una nueva Estrella de la Muerte es decepcionante y la batalla no consigue impactar como la original (más allá de por el hecho de sostener un desenlace a tres bandas que dura media película, algo inaudito entonces); el personaje de Han, como bien apuntas, queda absolutamente destrozado, reducido a un simple chistoso sin gracia... Torpeza, desidia, falta de inspiración, cansancio...
Pero si tuviera que decir qué es lo que rezuma de la película, diría que es conformismo y falta de ambición. O cobardía, si se quiere. Cobardía a la hora de abordar el argumento, no sea que pongamos al corazón del espectador (concretamente el de los niños) demasiado al límite (¿después de la dureza de El imperio contraataca aquí no va a morir ni Lando?). Y naturalmente cobardía en invertir mucho más dinero (sí, Lucas se lo hubiera podido permitir): ewoks en lugar de wookies, nueva Estrella de la Muerte en lugar de Coruscant, rodajes exóticos en California y Arizona en lugar de Noruega o Túnez, realización carente de espectacularidad/ambición (o simplemente talento) en demasiados tramos... Todo apunta a Lucas haciendo de tío Gilito y diciendo "muy caro, vamos a hacerlo más sencillo y barato".
La película acaba funcionando en el fan sencillamente por lo que arrastra (la historia y los personajes de las dos anteriores películas). Sin ese bagaje, sería aún peor que las innombrables precuelas.
Pero si tuviera que decir qué es lo que rezuma de la película, diría que es conformismo y falta de ambición. O cobardía, si se quiere. Cobardía a la hora de abordar el argumento, no sea que pongamos al corazón del espectador (concretamente el de los niños) demasiado al límite (¿después de la dureza de El imperio contraataca aquí no va a morir ni Lando?). Y naturalmente cobardía en invertir mucho más dinero (sí, Lucas se lo hubiera podido permitir): ewoks en lugar de wookies, nueva Estrella de la Muerte en lugar de Coruscant, rodajes exóticos en California y Arizona en lugar de Noruega o Túnez, realización carente de espectacularidad/ambición (o simplemente talento) en demasiados tramos... Todo apunta a Lucas haciendo de tío Gilito y diciendo "muy caro, vamos a hacerlo más sencillo y barato".
La película acaba funcionando en el fan sencillamente por lo que arrastra (la historia y los personajes de las dos anteriores películas). Sin ese bagaje, sería aún peor que las innombrables precuelas.
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¿Pero qué fan, Doe? Si el fan de esta saga debería incluso agradecer un título como ése.
Una saga de seis títulos con cuatro bodriazos, una peli mala con buen diseño de producción y una buena es una saga con fan poco exigente...¿de qué se sorprende nadie cuando son malas? ¡Si lo raro es que haya una buena! Lo que pasa es que esta saga, gracias a la millonada invertida en marketing, pilló a mucho ser humano con la guardia baja iniciándose al cine siendo un cani... y arrastra eso.
Porque, insisto..., yo hace poco vi la primera y es extremadamente mediocre de guión y dirección.
Una saga de seis títulos con cuatro bodriazos, una peli mala con buen diseño de producción y una buena es una saga con fan poco exigente...¿de qué se sorprende nadie cuando son malas? ¡Si lo raro es que haya una buena! Lo que pasa es que esta saga, gracias a la millonada invertida en marketing, pilló a mucho ser humano con la guardia baja iniciándose al cine siendo un cani... y arrastra eso.
Porque, insisto..., yo hace poco vi la primera y es extremadamente mediocre de guión y dirección.
JohnDoe
Tó lo gordo y tó lo negro
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¿Y quién no?
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Venga Magno,
no te crezcas sin control. Tú sabes perfectamente que a parte de todo el marqueting la primera Star Wars por muchas carencias que le busques, está repleta de imaginación, de creatividad desbordante y de múltiples factores que por sí misma se despega de su cine contemporáneo. Está sencillamente en el club de películas de la memoria colectiva como Regreso al Futuro, Indy, Alien, Tiburón, etc y tildarla de mediocre simplemente es injusto.
Es de esas que si vas a buscarle el talón de aquiles se lo encuentras fácil, pero que no es justo porque desprende magia a cada minuto. Y eso no es marqueting es amor al cine, coño!
no te crezcas sin control. Tú sabes perfectamente que a parte de todo el marqueting la primera Star Wars por muchas carencias que le busques, está repleta de imaginación, de creatividad desbordante y de múltiples factores que por sí misma se despega de su cine contemporáneo. Está sencillamente en el club de películas de la memoria colectiva como Regreso al Futuro, Indy, Alien, Tiburón, etc y tildarla de mediocre simplemente es injusto.
Es de esas que si vas a buscarle el talón de aquiles se lo encuentras fácil, pero que no es justo porque desprende magia a cada minuto. Y eso no es marqueting es amor al cine, coño!
Joer con los Ewoks 
Francamente, se ha dicho tanto de los ewoks que he preferido no decir nada, como probablemente haga con los gungans una vez hable de la amenaza fantasma. Simplemente paso.
Como bien apuntáis, los ewoks no son el mayor problema de la película, y mejor ejecutado incluso podrían haber sido una buena aportación para el universo. Y aun diría más, se podría argumentar que si hubieran sido Wookiees en lugar de Ewoks, siendo este el único cambio en toda la película, el final no hubiera tenido ningún sentido dado que en realidad la Alianza consigue ganar la batalla porque el Emperador no considera a los Ewoks una amenaza. Como dice Luke "Tu presunción es tu debilidad".
Si hubieran sido wookiees, habríamos tenido una peli completamente diferente, pero nadie nos asegura que hubiera sido mejor.
Francamente, se ha dicho tanto de los ewoks que he preferido no decir nada, como probablemente haga con los gungans una vez hable de la amenaza fantasma. Simplemente paso.
Como bien apuntáis, los ewoks no son el mayor problema de la película, y mejor ejecutado incluso podrían haber sido una buena aportación para el universo. Y aun diría más, se podría argumentar que si hubieran sido Wookiees en lugar de Ewoks, siendo este el único cambio en toda la película, el final no hubiera tenido ningún sentido dado que en realidad la Alianza consigue ganar la batalla porque el Emperador no considera a los Ewoks una amenaza. Como dice Luke "Tu presunción es tu debilidad".
Si hubieran sido wookiees, habríamos tenido una peli completamente diferente, pero nadie nos asegura que hubiera sido mejor.
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King, en tu texto tienes el propio marketing. "Talón de aquiles fácil, pero no es justo", etcétera. Hay mucho clásico popular de garrafa y, sí, éste no lo es en su diseño de producción, ¿pero no te parece mediocre el resto? Fíjate en la realización y en el guión, de veras. No hay por dónde trincarlo. Incluso actoralmente da grima.
La dos molaba mucho más, pero mira las otras cuatro...
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Tienes parte de razón pero no. Se nota una gran ingenuidad en la película y también se nota la mano de artistas primerizos en varias facetas, pero eso también es parte de la magia. Y es cierto que en la segunda hay más profesionalidad lo que completa lo iniciado.
Pero a mí la primera Star Wars no me choca por su ingenuidad sino que forma parte de su gracia, por eso son tan espantosos los pegotes de Lucas intentando hacerla mejor a lo largo de los años.
Que conste que para nada soy fan, me gustan más las otras de la "memoria colectiva", voy al core del asunto, la primera: "Mágica", la segunda "Majestuosa", la tercera "Infantiloide". Las modernas "Vergüenza".
Y esa es mi opinión desde mi punto de vista de amor al cine sin tener ni un sólo muñeco de star wars en casa.
Pero a mí la primera Star Wars no me choca por su ingenuidad sino que forma parte de su gracia, por eso son tan espantosos los pegotes de Lucas intentando hacerla mejor a lo largo de los años.
Que conste que para nada soy fan, me gustan más las otras de la "memoria colectiva", voy al core del asunto, la primera: "Mágica", la segunda "Majestuosa", la tercera "Infantiloide". Las modernas "Vergüenza".
Y esa es mi opinión desde mi punto de vista de amor al cine sin tener ni un sólo muñeco de star wars en casa.
Wontnerman
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- El tradicional y popularísimo bingo mexicano adaptando la iconografía de Star Wars a sus propios símbolos:
Mis dos ídolos:
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sleeper2002
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Hola, sabéis si se ha puesto a la venta en España el muñeco en blister de Kylo Ren? He buscado en 2 tiendas disney, en 2 drim y en carrefour pero no lo encuentro (hay de los otros personajes pero este no y no me saben decir si lo han tenido)
Alguien lo ha visto por Barcelona? o en alguna web que no sea a precio prohibitivo?
Gracias
Alguien lo ha visto por Barcelona? o en alguna web que no sea a precio prohibitivo?
Gracias
Hinomura Krycek
Bayofilo
Te diria que miraras en algun Corte Ingles o Toys r Us... Yo tengo el Black Series grande de 6" y lo encontre de casualidad en el corte ingles a 20 pavos.
En las Disney Stores tienes la version Elite metalica por unos 25, tambien es mas grande.
En las Disney Stores tienes la version Elite metalica por unos 25, tambien es mas grande.
juraria que lo ví el viernes pasado en la Drims de Diagonal Mar.Hola, sabéis si se ha puesto a la venta en España el muñeco en blister de Kylo Ren? He buscado en 2 tiendas disney, en 2 drim y en carrefour pero no lo encuentro (hay de los otros personajes pero este no y no me saben decir si lo han tenido)
Alguien lo ha visto por Barcelona? o en alguna web que no sea a precio prohibitivo?
Gracias
Hinomura Krycek
Bayofilo
Hubiera molado mucho tener esto de niño...