Lo malo de los making of de videojuegos es que tienen toda la pinta de ser muuuuy aburridos en comparación con los de las pelis, dado que se trata de un trabajo desarrollado fundamentalmente en oficina, con muy pocas posibilidades de anécdotas jugosas. Ni siquiera el motion capture con actores o modelos humanos creo que rompa esa tendencia. Como mucho, podemos contar con detalles técnicos o de diseño tanto visual como de jugabilidad, pero sinceramente no creo que tengan el atractivo suficiente para prestarles atención durante mucho rato. Al menos si no tienes un interés muy especial por ese mundillo.
Un saludete.