Ah, y otra cosa.
A mí tener una regla encima de la mesa para dar una hostia en la mesa y exigir silencio me parece algo repulsivo. He dado clase en academias a grupos de gente que suspendía (a la creme de la creme) y nunca he necesitado nada ni parecido. El respeto se gana de otra manera.
Y en cuanto a los nuevos métodos neo-políticas buenistas, pues depende del profesor, como siempre. Ser profesor es muy jodido, e igual que hay gente que tiene hijos para darle sentido a su vida los hay que se hacen profesores porque tienen tres meses de vacaciones. Ese es un problema gordo de pelotas, porque en vez de joder niños de dos en dos los joden en grupo. Culpar al método es muy fácil, pero no es tan sencillo.
Tenemos una pareja de amigos que son profesores de instituto, además de institutos con gente complicada, y como os podéis imaginar no son de la escuela del reglazo en la mesa para acojonar. Hemos tenido muchas conversaciones con ellos sobre educación, la última hace un par de semanas, y nuestro amigo (profesor de lengua y literatura) decía que si sabes tratarles son un amor. Y le decíamos: "sí, claro, menos los chungos", y el decía "los que más". Dice que lleva tiempo hacerte con ellos y te los tienes que ganar, y que seguir el "programa habitual" porque sí no te lleva a ningún sitio, pero que muchos de esos chavales de los más jodidos son así porque están hartos de que no se les entienda y les traten como la mierda que son (o parecen), pero que si los tratas con respeto al final entran. Contaba varios casos en particular, es súper interesante escucharle.
Ahora me podéis decir que claro, que solo los tiene que aguantar un rato, no todos los días en casa, y os diría que sí. Pero estoy respondiendo a un mensaje sobre educación en el colegio y el instituto, no a la receta mágica para hacerte con un hijo adolescente complicado.