Más allá de las estrellas, de Brian Daley (1979)
La segunda novela de Star Wars publicada, después de El ojo de la mente (1978), y antes del boom del universo expandido a partir de los años 90. De hecho, ambas novelas se publicaron antes del estreno de El imperio contraataca, y creo que, en el caso que nos toca ahora, se deja notar en la caracterización de Han.
La historia sigue una aventura de Han Solo y Chewbacca en una parte de la galaxia conocida como el Sector Corporativo, una aglomeración de planetas que vive al margen del Imperio. Allí tendrán que detener la tiranía del alto mando y liberar a un grupo de seres vivos que viven encarcelados.
Se trata de una novela de aventuras pura y dura, en la que no hay mucho sitio para los personajes y mucha para la acción. En este aspecto, se trata de una novela muy entretenida, con varias escenas de aventuras bien pensadas y diferenciadas entre ellas, cosa que se agradece. El comentario anterior sobre Han viene a ser que aquí es tan rudo y frío como lo vemos por primera vez en la cantina de Mos Eisley, aunque se atisba el corazón de oro que demuestra tener en las películas.
A favor de la novela se puede decir que el escritor inventa nuevos personajes, planetas, razas y segmento de la galaxia para jugar a su antojo sin preocuparse de las películas. Cabe decir que tiene lugar antes del episodio 4, en plena efervescencia contrabandista del dúo protagonista.
Me avergüenza decir que se trata de un libro que tenía guardando polvo en la estantería desde hace más de una década y que solo he desempolvado ahora tras el gran disfrute que fue la película de Han Solo: Una historia de Star Wars. No me arrepiento nada de haberla leído, y sí de haber tardado tanto en hacerlo...
Creo que es bastante recomendable como un relato de aventuras desprejuiciado, aunque puede que la prosa simplista del autor sea un impedimento para algunos.
La segunda novela de Star Wars publicada, después de El ojo de la mente (1978), y antes del boom del universo expandido a partir de los años 90. De hecho, ambas novelas se publicaron antes del estreno de El imperio contraataca, y creo que, en el caso que nos toca ahora, se deja notar en la caracterización de Han.
La historia sigue una aventura de Han Solo y Chewbacca en una parte de la galaxia conocida como el Sector Corporativo, una aglomeración de planetas que vive al margen del Imperio. Allí tendrán que detener la tiranía del alto mando y liberar a un grupo de seres vivos que viven encarcelados.
Se trata de una novela de aventuras pura y dura, en la que no hay mucho sitio para los personajes y mucha para la acción. En este aspecto, se trata de una novela muy entretenida, con varias escenas de aventuras bien pensadas y diferenciadas entre ellas, cosa que se agradece. El comentario anterior sobre Han viene a ser que aquí es tan rudo y frío como lo vemos por primera vez en la cantina de Mos Eisley, aunque se atisba el corazón de oro que demuestra tener en las películas.
A favor de la novela se puede decir que el escritor inventa nuevos personajes, planetas, razas y segmento de la galaxia para jugar a su antojo sin preocuparse de las películas. Cabe decir que tiene lugar antes del episodio 4, en plena efervescencia contrabandista del dúo protagonista.
Me avergüenza decir que se trata de un libro que tenía guardando polvo en la estantería desde hace más de una década y que solo he desempolvado ahora tras el gran disfrute que fue la película de Han Solo: Una historia de Star Wars. No me arrepiento nada de haberla leído, y sí de haber tardado tanto en hacerlo...
Creo que es bastante recomendable como un relato de aventuras desprejuiciado, aunque puede que la prosa simplista del autor sea un impedimento para algunos.