Joder, cuando vi esto llevaba varios días de ruta y sin entrar, y tuve que mirar dos veces la fecha para asegurarme de que no era del 28 de diciembre el mensaje.
A mí me bastó con la primera, cientos de millones gastados para contar las bondades de un ecologismo mágico de garrafa que no puede ser más hipócrita (con la maquinaria capitalista arrolladora que se gastan en estas superproducciones), un guion que parece escrito por un subnormal (y dicen que esta todavía es peor!) y postalitas artificiales para justificar la pasta. Que Cameron no sea un epiléptico en el montaje y tenga un poquito más de calma no quita que esto siga siendo el anticine, con más subrayados que pixels, ahogando cualquier planificación, cualquier idea visual en un monstruo que no es más que una demo de 3 horas.
Que ruede un documental (con cosas de verdad!) o que haga videojuegos, pero que deje en paz las salas para otras películas.