Discriminación "Positiva" y Políticas de "Igualdad"

Es que "esas mierda que lee", EXISTEN:

Ya lo sé, hombre, pero solo esa basura de periódico se hace eco de ellas.
A quién le importan estas gilipolleces veganas? :pensativo
De verdad vamos a hacer un akelarre porque cuatro zumbaos dicen defender el buen nombre de los animales?
No sé quién es más zopenco, si el tipo que critica el "lenguaje especista" o el que monta un auto sacramental por ello.
 
¿A que si? ¡Pues toma!

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He notado torpe en al Sr. Pavón en su intento. No estoy de acuerdo pues parte de una premisa falsa. Solo habla de las dos primeras frases, o mejor dicho, obvia el lamentable mensaje.

Yo como padre a mis hijas les digo y me dicen las dos primeras frases de vez en cuando. Ok maravilloso y lógico. Pero jamás en mi vida podré decirles cosas como lo que a continuación venía.

Los niños tienen pene.
Las niñas tienen vulva.
..... Correcto. Todo lo demás no viene a cuento y ofende. Al menos a mi. La intención por parte de esa gente era clara y vergonzosa.

Un abrazo!
 
Dos pésimos ejemplos. Si haces una campaña contra la obesidad infantil dejas claro que su objetivo es la prevención de enfermedades y problemas físicos. Si estás en un colegio y quieres asegurarte de que se enteren de que Dios no existe, también tendrías que asegurarte de señalar la importancia de la libertad de fe.


Por otra parte, veo que Manu prosigue su transformación en el Teluc del subforo de Política, sustituyendo links dudosos por memes y reculadas.
 
Coño, tu por aquí...

Se nota que no te pasas con asiduidad. Se te ve despistado. Sobre todo con lo de las reculadas. :diablillo
 
Con Duss en todo menos en una cosa... Manu no recula nunca! :diablillo
 
Penes, vulvas e ingeniería social

Al autobús de “Hazte Oír” no se le ha contestado con una batería argumental, o debates en medios, como si fuera un país libre, sino con amenazas de denuncias judiciales, ofensas, retirada policial, e insultos.

02.03.2017 - 04:00

La reacción airada e insultante de los medios y de ciertos cargos públicos a un mensaje políticamente incorrecto es una prueba de la dictadura del pensamiento único. El establishment ha saltado de sus poltronas públicas o subvencionadas porque alguien –me da igual quién- ha emitido un mensaje–me da igual qué- distinto a la verdad oficial.

La verdad y la moral son dictadas a través de la legislación y las instituciones internacionales; esas mismas que controla el establishment

Es triste, pero el consenso socialdemócrata ha creado una sociedad de ciudadanos-niño donde la responsabilidad se ha depositado en el Poder. La verdad y la moral son dictadas a través de la legislación y las instituciones internacionales; esas mismas que controla el establishment. El individuo de Occidente, sometido al terrible Estado Minotauro que se retroalimenta, es un pobre personajillo orwelliano.

El ciudadano-niño se siente liberado de tener que asumir la responsabilidad de construir su propio futuro, tutelado de la cuna a la tumba, resguardado de los riesgos de la vida, y sin tener que elaborar su propia moral. Ya lo hace el Poder por él.

Es el sueño del socialdemócrata que surge de la New Left: un Hombre Nuevo defensor de su amo, en aras de una Sociedad Nueva

Ese Poder nos ha hecho creer que la democracia es la combinación de derechos sociales con pensamiento único. Es el sueño del socialdemócrata que surge de la New Left: un Hombre Nuevo defensor de su amo, en aras de una Sociedad Nueva, igualitaria, homogénea y confortable gracias al paternalismo vigilante e imprescindible del Estado, y todo envuelto en la retórica de la democracia totalitaria.

El método es la lógica de los intolerantes, que obliga a eliminar al que piensa distinto o quiere iniciar un debate. No se trata solo de que los grupos que apoyan la verdad oficial son subvencionados y aupados a los medios de comunicación, convirtiéndose así en un resorte personal e interesado para el ascenso social y económico. Es que, además, los que opinan de forma diferente, reclamando libertad para decidir su presente y futuro, su moral y comportamiento, son acosados, insultados y expulsados de esa comunidad progresista y perfecta. La violencia no es solo física sino social y de comunicación. Esa es la nueva ola violenta que nos acecha.

El progresismo internacional ha impuesto una idea de comunidad basada en las identidades de grupo opuestas a las tradicionales

El progresismo internacional ha impuesto una idea de comunidad basada en las identidades de grupo opuestas a las tradicionales. Es el viejo planteamiento maoísta de conformar una Sociedad Nueva extirpando los “cuatro viejos”: pensamiento, educación, cultura y costumbres. Y lo llevan haciendo al modo gramsciano desde la década de 1970 mediante el control de la educación, las artes y las letras, con la legislación en la mano, a golpe de subvención a los colaboracionistas.

La escuela dejó de ser un lugar de instrucción intelectual y laboral para convertirse en el perfecto centro de adoctrinamiento. Lo hicieron los Estados nacionales, como el francés desde 1875, para inculcar, se quisiera o no, los principios republicanos. Lo repitieron las dictaduras en el siglo XX, que convirtieron los colegios en fábricas de patriotas nacionales o proletarios, en pioneritos, en pequeños vigilantes de la verdad oficial. Y a la “Formación del Espíritu Nacional” le sustituyó la “Educación para la Ciudadanía”, y luego “Valores éticos”, donde la solidaridad, el feminismo o el ecologismo tal y como dicta el establishment son principios obligatorios.

El político dicta “la normalidad” que el ciudadano-niño debe obedecer

El político dicta “la normalidad” que el ciudadano-niño debe obedecer. El Poder paternalista esconde la libertad en un cuarto oscuro donde al individuo le da miedo entrar. Se ha perdido la responsabilidad en la elección, y con ello la individualidad. Lo apuntaba Giuseppe Capograssi: el objetivo del Estado es conseguir que la persona desee ser como los demás, para lo cual solo tiene que seguir las normas dictadas por el establishment.

El castigo por salir del cauce es duro. En realidad, la izquierda alternativa, esa que está en Podemos y su entorno, no es más que la tropa de ese Poder transnacional que, como si fueran las SA, hace el trabajo sucio, callejero y mediático de romper cristales de la libertad. No son antisistema, son parte de él. Es la falsa oposición a la dictadura de la democracia social y el pensamiento único.

Si el ciudadano-niño no cumple, discrepa o quiere debatir los dictados morales del Estado paternalista, obtiene el merecido castigo. El ingeniero social debe corregir al individuo para conseguir la perfección, esa utopía uniforme a la que vamos encaminados. Las libertades languidecen bajo la verdad de los herederos de Rousseau, de aquellos jacobinos que querían imponer una nueva Era dándole la vuelta, como si de un gorro frigio se tratase, a todas las creencias. Incluso iniciaron un calendario alternativo, con meses cuyos nombres estaban tomados de la Naturaleza.

Al autobús de “Hazte Oír” no se le ha contestado con una batería argumental, o debates en medios, como si fuera un país libre, sino con amenazas de denuncias judiciales, ofensas, retirada policial, e insultos

Era el tiempo de la conversión de la persona en ciudadano gracias al Poder -como hoy-, que es quien dicta la única verdad y la moral exclusiva, porque sin su control parental el hombre es un lobo para el hombre. Corregir y dictar, esa es la clave. Pero aquello que decían los súbditos de Robespierre es lo mismo que con el tiempo suscribirían fascistas y comunistas: “Todo en el Estado, nada contra el Estado, nada fuera del Estado”. Claro que el Estado, confundido con el Gobierno, era y es para ellos el dictador de los comportamientos sociales y de su moral, como hoy para el establishment progresista.

Al autobús de “Hazte Oír” no se le ha contestado con una batería argumental, o debates en medios, como si fuera un país libre, sino con amenazas de denuncias judiciales, ofensas, retirada policial, e insultos. No me importa la certeza o la falsedad del mensaje, sino el bloqueo oficial y oficialista a la discrepancia, que muestra el recorte en las libertades, resultado de esa rendición consciente e inconsciente a la hegemonía cultural progresista.

Es posible que a la vista de esta ingeniera social puesta al descubierto, Karl Popper hubiera añadido un capítulo a su obra “La sociedad abierta y sus enemigos”.

Penes, vulvas e ingeniería social
 
Manu, no insistas. No da debate a lugar. Lo de ese autobús es ofensivo lo mires por donde lo mires. Y ese articulo rezuma naftalina de armario cerrado de lejos. Al que se le ocurrió la idea deberían aconsejarle algún psicologo, o en su defecto algún sexologo pues debe tener cientos de complejos acumulados e intenta proyectarlos sobre los demás.

Un abrazo!
 
Manu, no insistas. No da debate a lugar. Lo de ese autobús es ofensivo lo mires por donde lo mires. Y ese articulo rezuma naftalina de armario cerrado de lejos. Al que se le ocurrió la idea deberían aconsejarle algún psicologo, o en su defecto algún sexologo pues debe tener cientos de complejos acumulados e intenta proyectarlos sobre los demás.

Un abrazo!

Repito una vez más por que no sé si no se me escucha. Sobre todo por que no haces otra cosa que darme la razón. Lo del autobús puede ser todo lo "ofensivo" que quieras (que para muchos lo será), pero precisamente lo que dice el artículo (léelo con calma y sin prejuicios) es que estamos convirtiendo lo que nos ofende en delito, y esa es una senda MUY peligrosa. Sobre todo por que no es bilateral (si se ofende a los católicos o se les dice "arderéis como en el 36", entonces es "libertad"). Está orientada a un determinado modo de pensar, que impone sus criterios y dogmas y nos dice lo que debemos creer, bajo pena de darnos con la vara si nos salimos del cauce "correcto".

Insisto: no comparto PARA NADA lo de este autobús, pero si que creo firmemente que HazteOir tiene EL MISMO derecho a decir esto, que Carmena a montar campañas de concienciación sobre el transexualismo. Nos podrá gustar más o menos lo que digan, pero deberían tener la libertad de hacerlo. Y que luego cada uno decida lo que quiere creer y actúe como crea que debe actuar.
 
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Y una cosa más... Hasta las narices ya de las cazas de brujas del "nuevo progresismo". Ahora resulta que el autobús es delictivo, pero llamar en un artículo "homófoba" e "integrista" a Hazteoir, aparte de presuponer delitos que ni siquiera están investigados basándose en "coincidencias sorprendentes", está permitido. Manda cojones...

patrocinó la cena de gala de los premios de la asociación homófoba en 2004
Según las cuentas que muestra en sus memorias, la crisis no ha afectado nunca a la asociación integrista.

Esperanza Aguirre financió a HazteOir con dinero de la Agencia de Cooperación e Inmigración

¿Aquí no actúa la fiscalía popular? Ah, no, que estos se lo merecen. Pues a eso voy.
 
Homofobia: Aversión hacia la homosexualidad o las personas homosexuales.

Es una descripción bastante adecuada a sus planteamientos, no?
 
No.

Pero si quieres, te digo que eso da igual. Es ofensivo. ¡Que les prohiban decirlo! ¡Tirada inmovilizada YA y web cerrada!
 
La diferencia radica en que una campaña para concienciar sobre el transexualismo (esta palabra me pone cachondo y no se porque) no ofende desde el momento que intenta concienciar sobre una problemática social y que es inocuo a cualquier otra mente sana que lo lea o vea y no hay negación alguna en la campaña. Cada uno mete la polla o vive su vida sexual como quiera.

El caso del autobús es distinto. No es una campaña que abra miras sobre problemas latentes. Es una crítica y una negación insultante a una problemática. No abre miras. Cierra puertas y niega cualquier otra cosa, haciendo de menos (por se fino) a todos esas personas que se engloban dentro de un colectivo que tendría que estar normalizado.

Y guste o no. HazteOir es una asociación entre otras cosas homofoba hasta la médula y con vinculaciones mas que evidentes con los perlas de "Yunque". No hay mas que ver el C.V del interfecto que está a la cabeza de HazteOir y cabeza pensante de lo del autobús.

Todos tenemos nuestro ideario. Pero en ocasiones cuando algo es blanco y viene en botella, hay que ser humilde y reconocer las realidades.

Lo siento pero no comulgo con extremismos. Sean del color que sea. Y sinceramente estos de HazteOir son a mi entender basura extremista que solamente su existencia me avergüenza como ciudadano y mas como persona.

Un abrazo!
 
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