Discriminación "Positiva" y Políticas de "Igualdad"

Lo de las novelas es acojonante.

Hace décadas, algunas mujeres escribían con psuedónimo masculino (o sin poner su nombre, solo las siglas) por tener mayores facilidades o por creer que así, llegarían a un público más amplio debido a los prejuicios. Parece que hemos llegado a un punto en que estamos "igual" pero al revés, lo mejor será que los escritores usen un pseudónimo femenino para no ser tachados de misóginos y demás.

Por cierto, junto con Stephen King y Lovecraft, Agatha Christie es la autora de la que más libros y ediciones diferentes tengo. Y si hiciera un Top 10 no me cabe duda de que me entraría Patricia Highsmith, pues tengo prácticamente todo lo que escribió. Curiosamente, a la Highsmith no la suelen mencionar demasiado en listas de escrioras, y cuando lo hacen es en términos generales o hablando de la saga Ripley y pasando por encima del resto de su obra... quizá porque la mayoría de sus personajes femeninos son mujeres vanas, superficiales, débiles y neuróticas. Claro que también sus personajes masculinos son psicópatas, enfermizos, atormentados y débiles. Entre eso (ningún personaje de su obra está especialmente bien representado, independientemente de su sexo) y el que fuera mujer y lesbiana, supongo que a nadie se le ocurriría tacharla de misógina.

Aprovecho para recomendar su novela El diario de Edith, un auténtico proceso de descomposición mental. La Edith del título, al contrario que la mayoría de mujeres de sus libros, es una mujer adorable y con la que se puede empatizar fácil y rápido: una mujer moderna, que divide su tiempo entre los quehaceres de su casa y el cuidado de su hijo, y sus inquietudes culturales, políticas e intelectuales. Una mujer que escribe, publica, y tiene una vida intensa en todas sus facetas, y a la que la vida le va a gastar una jugarreta tras otra, todas ellas monstruosamente injustas: ella, sin embargo, comienza a inventar y a consignar en su diario acontecimientos felices que jamás han ocurrido...

Junto con Ese dulce mal es la novela más atormentada, fascinante y absorbente que escribió Patricia.
 
Lo que no veo demasiado coherente es, por un lado, afirmar que existen más de dos sexos y que tener una visión binaria de la biología es de retrógrados y, por otro lado, decir que a los trans hay que reconocerlos como miembros de derecho de uno de los dos sexos binarios. No me extraña que al final colectivos trans y feministas hayan a acabado a hostias, si es que sus bases teóricas tienen más agujeros que el gruyere.
 
Alguien más siente su vida que gira en torno a TERFs y géneros?

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Los del tipo este no veo ni uno. Me aburre, no dice nada interesante. Al contrario que UTBH o Inocente Duke, este va sin guión a improvisar lo que le pasa por la cabeza en el momento, y para hacerlo así, entreteniendo y aportando algo, hay que saber. Además, es que no puedo con el estilo de la coleta, la raya en medio y las camisetas sin mangas con la piel más blanca que un sueco.
 
Depende de lo que entiendas por "mujer". Si hablamos de sexo biológico, no solo no es una tontería, sino que no hay vuelta de hoja.
 
Depende de lo que entiendas por "mujer".

Ese es el objetivo último. Difuminar y relativizar lo que entendemos por los sexos biológicos y binarios. Lo confiesan ellas mismas, para acabar con el patriarcado y el machismo estructural, hay que acabar con las categorías hombre/mujer que son la base de la opresión. Que no cuenten conmigo para ir contra la naturaleza por puros fines ideológicos. Siéntete como quieras y recurre a cirugía y fármacos cuanto quieras para sentirte bien contigo mismo, pero yo tengo claro lo que es un hombre y una mujer, y ningún Estado tiene derecho a meterse en mi cabeza para imponerme un pensamiento.
 
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