Doctor Who

En The face of evil nos presentan un planeta donde vive una tribu en estado salvaje, adorando a un dios llamado Xoanon, que frecuentemente les ordena luchar (aún con grandes pérdidas de vidas humanas) contra un grupo rival, los Tesch. Una joven salvaje, Leela, niega que Xoanon exista siquiera, incurriendo en herejía y siendo desterrada. A punto de ser atacada por una criatura invisible que mora en los páramos, es rescatada por el Doctor, que acaba de llegar a ese planeta.

face2.png


El Doctor descubre que hay una base real y científica para los elementos mitológicos de la tribu. Así, Xoanon es en realidad, un súper-ordenador inteligente, y los salvajes son los descendientes de un grupo de viajeros espaciales, varado hace mucho tiempo en el planeta. Lo más perturbador es que el Doctor tiene una gran semejanza con "el Maligno" un poderoso enemigo de Xoanon, del cual hay una estatua gigante virtualmente idéntica a él, aunque el Doctor no recuerda haber estado antes en ese planeta...

Al final de este serial, Leela se convierte en la nueva companion del Doctor. Y lo hace por sus ovarios, ya que el Doctor no parecía dispuesto a prestarse a aceptarla como compañera de viaje, pero ella se sube a la TARDIS y la activa, de todos modos :lol Leela (interpretada por Louise Jameson) es salvaje, impulsiva, supersticiosa e ignorante (aunque esta faceta parece disminuir a lo largo del serial, conforme el Doctor le explica que los aderezos de su religión tienen una expliación científica). No duda en matar a dos hombres a sangre fría con espinas venenosas, y siempre tiene el cuchillo a mano (me recuerda un poco al personaje de Ursula Andress en Dr. No). A ver que tal resulta.

image-w1280.jpg
 
Leela es una de mis favoritas. Groening manifestó que su personaje en Futurama le debía el nombre a ella. Y va mejorando con el tiempo. Y no solo por la verdad como un templo que ha soltado Jesse Custer.
 
The Robots of death presenta una situación tan vieja como la propia ciencia ficción: la posibilidad de que las máquinas inteligentes (aquí concretamente, robots humanoides) puedan volverse contra la humanidad, sus creadores.
Leela y el Doctor llegan a una estación minera espacial. Allí, un reducido grupo de gente trabaja extrayendo mineral por cuenta de una gigantesca compañía comercial, con la esperanza de hacerse ricos gracias a sus comisiones. Para asistirles en las tareas pesadas o peligrosas tienen a su servicio a varios robots, propiedad de la compañía. Todos los mineros humanos tienen sus rencillas, envidias y odios entre sí, que parecen avivadas por el hecho de pertenecer a diferentes castas.

p00vfhp1.jpg


La llegada del Doctor y su nueva compañera coinciden con una serie de asesinatos brutales que van mermando a la pequeña compañía minera. Lógicamente, los mineros sospechan del Doctor y Leela, dos intrusos que no pueden explicar su presencia allí, pero pronto queda establecido que ni ellos ni los propios mineros pueden haber cometido los crímenes, y el Doctor desarrollará la teoría de que los responsables son los silenciosos robots, a pesar de que los mineros le aseguran que eso es imposible, pues el primer programa que se graba en un robot no le permite, por acción u omisión, hacer daño a un ser humano...

Bastante entretenido, muy "Asimov", mola como desarrollan el concepto de "robofobia" que sufre uno de los mineros, el final con el helio es :lol y el villano tiene unas motivaciones a priori interesantes, aunque por supuesto no se profundiza demasiado.
 
Esto no es un serial pulp, esto es una orgía pulp. The talons of Weng-Chiang es el serial más currado y loco que he visto hasta este momento. Con él se cierra la temporada nº 14 de Doctor Who, y es un serial de 6 episodios en lugar de 4, pero donde otros seriales de 6 los he visto sobre-expositivos y redundantes, aquí se nota que aprovechan realmente el espacio narrativo disponible para contar una historia. Guioniza Robert Holmes, el principal culpable de todas las cosas que me gustan del Who de Baker visto hasta ahora. Y no decepciona.

DrWho-1977-WengChiang-preview.jpg


¿Que tienen en común Fu-Manchú, Jack el destripador, Sherlock Holmes o el Fantasma de la ópera? Pues, aparte de ser obras (más o menos) pulp, según lo que consideremos "pulp" (el tema podría dar para hilo propio, más que para comentario en este post) y aparte de ser obras de gente como Conan Doyle, Sax Rohmer, Gastón Leroux, o la triste realidad convertida en mito en el caso del destripador, son parte del imaginario colectivo popular de donde ha bebido el entretenimiento en todas sus formas (literatura, cine, televisión, teatro...) durante buena parte del siglo XX, y aún este en el que estamos. Y además (o quizá precisamente por ello) son mitos referenciados (y reverenciados) en este serial.

El Doctor llega con Leela al Londres victoriano (por primera vez vemos a Louise Jameson vestir un atuendo "moderno" que no sean sus harapos de salvaje característicos). Deciden ir al teatro, después de que el Doctor se atavíe con sus ropajes y sombrero característicos de cierto personaje (característicos de la imaginación popular, pues creo recordar que a Holmes no se le describió exactamente con tales atuendos). Asisten al espectáculo de un oriental llamado Li H'sen Chang, quien hace trucos de ventriloquia con un muñeco llamado Mr. Sin, además de variados trucos de ilusión y mentalismo.

talons.jpg


El caso es que una serie de sospechosas desapariciones y muertes de muchachas que ocurren en Londres estos días (con sus ataques misteriosos en callejones llenos de niebla) aunque tienen desconcertada a la policía, parecen confluir confusamente en el umbral del teatro donde actúa Chang, al tiempo que varios empleados del teatro aseguran a su jefe ser testigos de la presencia de un fantasma en el recinto. El Doctor no tardará en verse involucrado en un caso bastante más sórdido y extraño de lo que aparentaba...

Ratas gigantes y carnívoras criadas en las cloacas bajo Londres, siniestras bandas de asesinos orientales que atacan en la noche, hipnosis, pasadizo ocultos y puertas secretas, muñecos de ventrílocuo que están vivos (en realidad, un delicioso homúnculo con mente parcialmente porcina), amenazadores dispositivos que roban la fuerza vital de sus víctimas, policías torpes, gigantescos entramados subterráneos repletos de las trampas y las armas más exóticas, secuestros, fantasmas, ¿amor verdadero? En fin. Hablaba de orgía, y me quedaba corto.

doctor-who-the-talons-of-weng-chiang-story-91-mr-sin-magnus-greel-michael-spice-deep-roy-review.jpg


Toda la parte final, con el villano en su templo subterráneo a lo oriental y sus malvadas tropas, me ha recordado y no poco, a "Golpe en la pequeña China". Pero es que, al fin y al cabo, Carpenter y Holmes beberán más o menos, de las mismas fuentes, aunque quizás Holmes bebe más de las tradiciones literarias europeas, y Carpenter, de pelis de vampiros chinos y cine de artes marciales con factura en el Oriente.

En cualquier caso, una delicia de esas que hay que ver al menos, una vez en la vida. Y seguramente, muchas más.
 
Comienza la temporada 15 de Doctor Who con horror... Horror of Fang rock, concretamente, serial de 4 episodios que gira en torno a un aislado faro en el que "pasan cosas".

En algún momento, a principios del siglo XX, el Doctor y Leela llegan a la costa justo después de que caiga en la zona un meteorito que es observado por los 3 vigilantes del faro. A ellos se les unen en breve lo tres supervivientes de un naufragio, el flemático Lord Palmerdale y su séquito. Pronto se producen algunas muertes, que el personal del faro relaciona con "la bestia de Fang Rock" una leyenda según la cual, hace muchos años llegó al faro una extraña bestia, que trajo consigo locura y muerte. El Doctor no tardará en sospechar que es algo menos mitológico...

p00vh4db.jpg


Molan varias cosas de este serial. En primer lugar su tétrica atmósfera, que nos recuerda invariablemente a "La niebla" de Carpenter. Como ocurría en Talons of Weng-Chiang, probablemente ambas obras beben de la misma fuente, en este caso los relatos de horror marino de W.H. Hogson, los ambientes de Algernoon Blackwood o Machen.

Además, es divertido el curioso contraste entre los 3 vigilantes del faro: el anciano nostálgico de tiempos pasados, siempre con la batallita en la boca, desconfiado de nuevos inventos y cualquier cosa que huela a progreso, el hombre de mediana edad, pragmático y realista, y el jovencillo enérgico y distraído que tiene la mente a mil kilómetros de ese faro dejado de la mano de dios.

La Leela de Louise Jameson se crece por momentos, abandonando poco a poco sus viejas mitologías y sustituyéndolas por una base científica (en este serial la vemos aprendiendo a leer). Pero no deja de ser una salvaje criada en un mundo muy distinto al nuestro, pez fuera del agua como vemos en ese momento en que está dispuesta a despelotarse delante de los atónitos vigilantes del faro, que llevan a saber cuanto sin ver mujer.

De nuevo aquí vemos al Doctor acojonado por una amenaza desconocida. Más allá de la simple coincidencia de que el Doctor llegue siempre oportunamente al tiempo y lugar donde hay una amenaza contra la Tierra (como una especie de señora Fletcher alienígena, que donde va, se lía la cosa) el Doctor de Baker siempre se nos ha mostrado falible, humilde y dispuesto a rectificar allá donde ha errado, muy lejos del típico personaje "Mary Sue" de turno.

who-fang04.jpg


Por terminar, y esto es algo que creo, resulta absolutamente inédito en la serie clásica, el serial acaba con el Doctor y Leela marchándose solos, sin que nadie quede para despedirles, pues absolutamente todos los demás personajes que aparecen en el serial, han muerto. Curioso cuanto menos.
 
Alucinante es poco el adjetivo para describir The invisible enemy. Aquí tenemos al Doctor y a Leela llegando a una estación espacial llamada Titán, que ha sido invadida por un extraño ente, una mente-colmena llamada el enjambre, que se apodera de la mente de la gente para cumplir su propósito, básicamente, reproducirse. En Titán, el Doctor será escogido e inoculado como portador del "Núcleo" algo así como la abeja reina del enjambre. Intenta luchar contra ello, pero fracasa. Con ayuda de Leela y de un astronauta de Titán sin infectar, llevan al Doctor a un hospital espacial donde intentarán curarlo, aunque el enjambre ha ido allí con ellos y pronto empieza a "asimilar" a todo el personal...

x1080

The invisible enemy pega el salto del tiburón al final de su segundo capítulo (de cuatro). Al final del segundo capítulo, el doctor Marius, del hospital espacial, clona al Doctor y a Leela, miniaturiza a los clones, y se los inyecta en vena al Doctor, para que "desde dentro" busquen y extraigan al Núcleo :roto2

En pocos momentos, Doctor Who se marca un remake de "Viaje alucinante" con presupuesto de quiosco de pipas, suplidos los medios por las ganas que le ponen Baker y Jameson, principalmente. Hacia el final, el perro mecánico con IA del doctor Marius, K-9, se irá con el Doctor y con Leela, acompañándolos de aventuras. Este perro ("perro de hojalata" que le llama Leela) es uno de los companion más recordados de esta etapa, hasta el punto en que el intento fallido de Spin-off, con Elizabeth Slanden como Sarah Jane Smith, se tituló "K-9 and company".
 
Empezando la S13. FLUX.

Sorprendido por el nivel de FX… están que lo tiran… mejores efectos que alguna marvelada. Y el personaje del perrete me hace mucha gracia. Karvanista mola.

86b68597-f99a-4861-9a92-294ae706253f-dog-alien-doctor-who.jpg
 
Image of the Fendhal me decepcionó bastante. No es malo, pero no logró engancharme. Quizá porque en este serial los subtítulos estaban hechos con el traductor automático... que a ver, soy consciente del CURRAZO desinteresado que se pegaron para hacerlos, currazo sin el cual probablemente, me habría muerto sin ver el Doctor Who clásico, porque aquí eso no lo sacan en la vida, da la impresión de que la tele británica es veneno aquí, y si a eso sumamos el paupérrimo estado del formato físico en Spain.... Pero es un handicap.

Image-of-the-Fendahl-Wanda-Ventham-Thea.jp_.jpg


Luego, la historia tampoco me entusiasmó. Es una historia que en síntesis, se ha contado muchas veces en la ficción de Gran Bretaña. De hecho, por su sinopsis podría alguno despistarse y pensar que hablábamos de "El príncipe de las tinieblas" de Carpenter, que era, precisamente, un homenaje a los seriales de Nigel Kneale, creador de la serie Quatermass, así, un grupo de científicos toman un edificio religioso para una investigación científica más bien extraña y de la que se guarda en secreto su verdadera importancia. El experimento allí desarrollado despertará fuerzas antiguas que habrá que detener, y descubrimos que las implicaciones esotéricas que impregnan el lugar tienen una base "científica" de origen alienígena.
 
Aún no lo he visto. Parece ser que Tennant volverá para tres especiales el año que viene, pero no como el décimo sino como el décimocuarto. Está claro que no tienen mucha esperanza en el niggah doctah , a ver que pasa. El problema de la Doctora no era su sexo, ella molaba, es que los guiones solían apestar excepto honrosas excepciones.
 
Arriba Pie