el doctor mostrando fastidio ante lo que en anteriores cuerpos hubiese sido un espectáculo de felicidad. Un poco de contraste era necesario, ya. Si el guión es maravilloso, los secundarios aquí son perfectpos. Todos han rayado a la altura. La cara de Capaldi cuando Marian le besa agradecida es de un desolador y fragil maravilloso. Se puede ver todo el miedo a no ser un heroe y la esperanza de serlo todo en uno. Jenna casi se lleva el episodio pa casa ella solita. Adoro a Matt, y me gustaba los dos en la anterior temporada, pero le pasa un poco como a Lis Sladen y Pertwee/Baker, aquí hay una quimica y una relación que ha subido varios enteros y es verdaderamente fabulosa. Y la independencia y la necesidad de actuar a veces como correctora del Doctor en vez de su fan a Clara le ha venido de perlas.
Visualmente muy bonita, quizás la escena del duelo a arco es algo constreñida y a momentos algo falsa, pero nada terrible, y el resto, estupendo. El corte de escena es una chapuza, y la debilitado un poco el resultado final. Aparte de inutil, porque de nada me sirve que quieras respetar los sentimientos de los familiares al no mostrar una decapitación, y sin embargo dejar la decapitación de un robot con primer plano de su cabeza cercenada y una coña sobre ejecucuciones con descabezamiento... Al familiar que no sea una decapitacion de un humano en directo no le va a sentar ni peor ni mejor que recordarle las decapitaciones anteriormente, y de coña encima. Que si, que es un corte gilipollas se mire por donde se mire, pero es que uan cosa es ser gilipollas, y otra ser gilipollas e inutil a la vez; si vas a hacer el imbécil, que no te pillen, majo. En todo caso, tenemos un corte de un minuto que se carga el sentido del titulo, que se carga la escena en la que golpea a un robot con el puño y se hace daño como engaño de guión, se carga el chiste que le suelta Capaldi a Robin sobre ver si tras cortarle la cabeza se seguiría riendo, se carga la NECESARIA escena en la que Robin derrota al Sheriff de Nothingham por su habilidad mayor con la espada, como debería ser, en vez de solamente gracias a una inspiración del doctor, y nos deja con una frase de apoyo a una exposición sin la exposicion que resulta torpe y falta del impacto perseguido.
Chapuza de libro.
Tampoco me ha gustado Lady Marian, en ingún sentido. La actriz lo hace bastante mal, y el personaje, que debería ser mítico, resulta bastante soso y unidimensional, lo que le quita un poco el romance al asunto. Or cierto, al final, en el workprint, cuando Marian y Robin se reencuentran, el cachondo de la lúsica temporal nos mete la canción de Titanic en versión instrumental. No sé por qué, pero no he parado de reirme.