A ver, es un tema muy amplio y con tantas aristas y perspectivas que no sé muy bien por donde empezar, así que lo haré desde un punto de vista estrictamente personal, es decir, desde mi mismo.
Coincido con el sentimiento que ha generado el autor del post: el desapego general hacia el cine y la afición de ver películas... pero al mismo tiempo con el anhelo de recuperarlo.
Mi situación personal hace que tenga un tiempo bastante limitado de ocio y que el hecho de ponerme a ver una película tenga que ser bastante planificado, escogido y poco espontáneo, algo que tambien va muy unido al acto cinéfilo.
Ademas está todo el asunto de dónde visionar, y ahí vamos a un punto capital: no se trata tanto de ver películas como de ir al cine. De una rutina casera como de una liturgia. Desplazarte, elegir en la cartelera, con quien vas, a qué hora, en qué condiciones... el cine en casa mata todo eso. Y no entro ya en la oscuridad, la sociabilidad anónima, etc.
Yo iría siempre al cine, pero entre falta de tiempo, de educación de la gente , de erráticas en la planificación industrial y exhibidora, de maltratos... y de oferta , he terminado por ir poco , muy poco, aunque este verano he ido algo mas para intentar corregirlo. Personalmente pondría mas fiestas del cine y sobre todo, mas cuidado en la programación y calendarios de estrenos para que no se pisaran unos a otros, así como ciclos, eventos, etc.
Vamos con la tendencia actual de las cinematografías. Para mi Hollywood no es todo el cine , no es una metonimia. Es mas, Hollywood ahora mismo es mas industria de entretenimiento que cine propiamente dicho, les importan mas la mercadotecnia asociada en forma de la cultura de las IP que las películas. Ya sean parques temáticos, merchandising o plataformas audiovisuales.
Pero si que es cierto que por extensión, Hollywood ha contaminado al resto del cine mundial adoptando todas las estrategias de captacion cultural existentes: woke, feminismo, ultracortoplacismo en la atención, ... luego está el tema del digital, que ha ido por los senderos mas equivocados. Casi nadie ha entendido bien las posibilidades de lo digital, salvaría a Michael Mann que es el primero y el que mejor supo entenderlo y algun otro como Lynch en su última etapa o Almodóvar... pero poco mas.
Todo eso se traduce en lo que dice
@Ropit : el tiempo. La película ya no es tal sino un sustrato que no deja huella ni relevancia en quien la ve porque es una sucesión de concesiones pactadas a uno y otro sector o estrato social... todo tiene que gustar a todos... sin aburrir en ningún momento ( no hay espacios vacíos, ni silencio ni subtexto ) y claro, el arte y el cine no es eso, es precisamente lo contrario, un punto de confrontación entre autor y espectador. Uno tiene que ir a buscar al otro, no llevarle de la mano todo el rato y explicarle qué significa cada imagen que ve. Ni un guia de un museo se atreve a tanto!!!
No estamos tan lejos de ver una sucesión de videos de TikTok estrenado en cine como película, al tiempo (
Jackass fue pionera en esto)
Decía Haneke lo de que ir al cine debe tener el valor de salir un poco distinto a como entraste en la sala porque sino no merece la pena gastarse tanto dinero... a ver cuántas veces se ha cumplido eso con las películas que Hollywood nos ha dado en el ultimo decenio!
Os digo otra cosa , la película que mas ganas tengo de ver este año no es de Hollywood, ni americana: es la de Albert Serra. Y si me apuras, The substance, la de Coppola y la de Almodóvar tampoco son Hollywood, aunque tengan a estrellas de allí en su reparto. Y son las que tengo apuntadas en mi lista de si o si.
En cuanto al móvil, es el uso que le damos... y el contrato que hemos firmado al adquirirlo sin darnos cuenta. Me parece un dispositivo muy útil ( en su día salvé una situación muy complicada de un familiar gracias a su uso, cuando todavía estaban "en pañales" , para entendernos ) pero asociado a su desarrollo han venido las grandes tecnológicas que por detrás han sabido cómo "dirigirnos" ... La clave está, como en el tabaco, en aquella viñeta de Quino: quien se fuma a quien? Tu al cigarrillo o este a ti? Quien usa a quien? Tu al movil o el movil a ti?
En fin, que coincido con Tarantino cuando dijo eso de que le gustaría vivir en cualquier época de la historia anterior a la invención de los smartphones.
La huida a otras artes tambien la he experimentado: durante la pandemia me refugié mas que nunca en la lectura. Bendita pasión. Tambien en la radio y podcasts... y es ahí donde vuelvo al cine, porque trato de aportar a algo a uno de ellos y sencillamente necesito ver cine y pensar sobre él para tener algo que contar.
De ahí saco otra reflexión: parte de mi cultura cinéfila ha ido pareja a tener miradas ajenas ( bien sean críticos, revistas o programas de cine ) que guiaran mis gustos y juicios de valor... y ¿dónde está ahora la crítica española de cine? ¿En qué estado? ¿Qué revistas subsisten?¿Con qué nivel?No digamos ya los programas ,con el de Garci Classics recién cancelado. Incluso este mismo foro ya no tiene la misma actividad de antaño. Es otro punto que ha ido decreciendo en mi memoria e influencia.
Con lo de la disponibilidad o el caso del pastelero diabético pasa un poco lo apuntado con anterioridad, tener todo a mano "paraliza" la capacidad de elección. No entraré en el ya manidísimo tema del logaritmo que en mi caso no funciona, pero tenemos a RTVE.play donde podemos encontrar joyas del cine español y europeo, y series que daba por perdidas. Está ahí, a la vista de todos... pero la gente lo usa?
Y ya para finalizar, tengo una duda: cómo véis las películas en casa? Tumbados en el sillón? En una silla? En la cama? En el ordenador desde una silla de gamer?
Mi sillón por cierto no es muy cómodo y me estoy pensando en pillarme una de esos sillones bajos individuales del Zara, se aceptan consejos
), pero llegará el día, espero, en que podré tocar un campeño serrano sin que el peque me chille... Y lo mismo espero con las pelis, el poder verlas con ellos y comentarles cosas acerca de lo que cuentan y cómo se hicieron. Que al final el cine es parte fundamental de mi vida, y compartir eso con ellos es para mí tan importante como hablarles acerca de mi propia familia.
