Desconozco la regulación aplicable en Cádiz sobre la venta ambulante de productos artesanales. Pero no es lo que importa de la declaración. Una mujer mediante el populismo, la ingenuidad, la demagogia y desde la más absoluta ignorancia acerca de la política, le ha ganado por la cara el discurso al partido que gobierna un Ayuntamiento importante como el de Cádiz. Durante un instante esta mujer ha sido poderosa, y lo que nos queda analizar es con que pasmosa facilidad lo ha hecho.