Esa persona a la que usted se refiere ha quedado libre ya, tras ver registrado su domicilio y ser acusado de los delitos de alzamiento de bienes, blanqueo de capitales y evasión fiscal. El Ministro de Justicia Rafael Catalá se ha mostrado triunfal diciendo que esto demuestra que la Justicia es igual para todos. No termino de estar de acuerdo con esa aseveración, pues las personas a la que usted se refiere quedan libres y a los pringadetes que protestan frente al Parlamento Autonómico mientras sus representantes políticos les miran por encima del hombro, poco menos que les cae la perpetua.
Rodrigo Rato. Artífice del milagro español y uno de nuestros más reputados políticos. Debería haber sido presidente, pero no estaba a favor de la Guerra de Irak. Por lo tanto el regalo de Aznar para con su "patria" fue Mariano Rajoy. "Rato, se fuerte" supongo que será el contenido del mensaje enviado esta tarde a su antiguo compañero desde Moncloa. Rodrigo Rato. Nadie podía mentar su nombre antes de santiguarse ante la envergadura de este prohombre. Vicepresidente económico, Ministro de Economía y Hacienda con Aznar, Director General del FMI (exportamos nuestros mejores talentos), y tiempo después el talento fue rescatado por Doña Esperanza Aguirre para sustituir a Miguel Blesa al frente de Caja Madrid / Bankia. Un curriculum nada desdeñable que después le sirvió para entrar de Consejero en varias multinacionales españolas antes de ser echado a patadas cuando vieron que su presencia iba a ser más perjudicial que buena para la institución. Pero casaba como anillo al dedo, según podemos sacar después de haber escuchado las confidencias de Javier de la Rosa al pequeño Nicolás.
Sus nuevas cumbres delictivas se suman a las ya famosas "tarjetas black", no sin menospreciar la salida de Bankia a bolsa y su gestión en la entidad que tuvo que ser rescatada con la modesta cantidad de veinte mil millones de euros, tanto suyos como míos. ¿Los van a devolver? ¿Por quién habéis tomado al entramado político - económico - financiero que nos da el pan para que coman nuestros hijos? Es el precio a pagar para que usted siga teniendo los resultados de lo que ya algunos de nuevo denominan gran milagro español, trabajar doce horas por ochocientos euros. ¡Y no pidas que te paguen las horas!
Pese a lo que pueda parecer, don Rodrigo estaba libre y al menos su imagen más o menos digna hasta que supuró el caso conocido como "tarjetas black" para los directivos de Bankia. No solo compraban licores a cargo del banco gentes del PP, lo hacían los partidos de izquierda, derecha, arriba, abajo y centro, además de los tan siempre solidarios sindicatos españoles que después nos dicen cuanto nos defienden tras habernos echado a los perros.
Pero por favor, no dejemos que el asunto Rato nos aparte la visión sobre otro en el que está bien relacionado. Javier de la Rosa sacó la boca a pasear cuando se estaba tomando un café y un sobado con el célebre pequeño Nicolás. De Rato decía que iba con su superior a un banco de Madrid algunas mañanas a sacar maletas. En aquel momento eran más finos que ahora, cuando el dinero suele ser guardado en bolsas de basura. Pero en aquellos momentos, el dinero iba en maletas o maletines y viajaba escoltado por cuerpos de policía en el AVE para pagar a los Pujol para que no se hicieran independentistas. O sacar trescientos milloncejos del Rey Juan Carlos, el héroe, el salvador de la Democracia. Quizás esta noticia, que ha pasado sea más desapercibida nos haya dejado sin embargo una radiografía más general del sistema que hace mover los engranajes de este bonito país. Un país que tiene a Velazquez, Goya, Picasso, Lorca, Severo Ochoa, Ramón y Cajal, a Franco, Aznar, Zapatero y Rato. Y muchos más que me dejo. Un curioso país, donde da igual las toneladas de mierda que caigan sobre el sistema, sobre los partidos tradicionales y sobre los sindicatos. Estos resisten y hablan, mostrándose como la única alternativa, como los que saben lo que hacen, como que son los que tienen experiencia en gobernar. Mariano no necesita que le digan que sea fuerte, a él, siendo castizos, se la suda todo a dos manos. ¿Sedes en B? ¿Cajas B? ¿Bárcenas? ¿Gürtel? ¿Rescate a bancos? ¿Amnistías fiscales? ¿Suicidios? Él resiste. En eso, hay que reconocérselo, es el mejor.
Rato mientras tanto, ahora acostado con su pijama y con sus pantuflas, verá de nuevo mañana la luz del sol. E irá todo digno por la calle, diciendo que colabora con la justicia. Mientras tanto pordioseros, ganapanes, robagallinas, si son detenidos se pudren. Esos, y los peligrosos terroristas que se manifiestan contra todos estos valerosos prohombres.