El día 11 de junio de 2011, a las 9,30 horas, en la estación de Renfe de Gijón, Guadalupe cogió el tren con destino a Oviedo. A su vez, Cipriano y Mario, que iban juntos, también se subieron al mismo tren, sentándose Cipriano al lado de Guadalupe y Mario enfrente de Cipriano y de Guadalupe.
En ese momento, con inequívoca intencionalidad sexual, Cipriano se acercó a Guadalupe y comenzó a decirle las siguientes palabras: "Sabes tía, me das morbo, métotela por el culo y sácotela por la boca, no la viste más dura en tu vida, póngote mirando a Cuenca", expresión esta última que repitió y le metió la mano entre las piernas tocándole la zona del pubis por encima del pantalón, con el rechazo de Guadalupe que intentaba evitarlo abandonando el lugar en el que se encontraba y cuando se levantó para alejarse Cipriano la tocó por la entrepierna.
Bernardino que viajaba en el tren, intervino para intentar poner fin al comportamiento del acusado y fue agredido por éste, causándole lesiones consistentes en equimosis periorbitaria izquierda con hemorragia conjuntival y erosión interna labio superior con restos de epistaxis y bultoma y enrojecimiento parietal derecho, invirtiendo 15 días en su curación no impeditivos para su actividad habitual y precisó primera asistencia sin tratamiento ulterior.
Durante los hechos acaecidos con Guadalupe , Mario -Guardia Civil en activo- estuvo riéndose permanentemente, sin intervenir en ningún momento, llegando incluso a grabar en su teléfono móvil las palabras que Cipriano dirigía a Guadalupe , y a huir -por dos veces- de los agentes de la autoridad comisionados para la investigación del suceso.