diazign
Siamese Dream
(de El Mundo)
Saludos.
En Madrid era todavía más fácil porque residía en un hotel y podía invitar a quien quisiera y luego devolverla al corazón de la noche. Tenía un camarero amigo. Su obligación subirme tres o cuatro croissants después de haber hecho el amor. Quedábamos en la escalera y hacíamos el cambio. Él se llevaba a la chica y yo me quedaba con los bollos. Sexo y comida, la noche perfecta
Beto dijo:Los culés deberiais preocuparos por el presidente que teneis (que vaya tela el que teneis) y dejar de preocuparos por el del Madrid.
carmillaFan dijo:Lo más grande es que al teutón no lo pueden echar tan fácilmente por la pasta que tendrían que soltar.
ElflameadodeMoe dijo:Marina?