Para las pensiones sí, cambiar el modelo, pero tampoco se quiere cambiar.
Yo discrepo en lo del capitalismo. A principios de siglo XX había tanto capitalismo como ahora y las tasas de natalidad son ciencia ficción comparadas con las de ahora. Al menos el capitalismo es una variable más, y no la predominante.
Para mí, la disminución de la natalidad tiene su origen en un cambio profundo de valores en las sociedades occidentales, que es multifactorial: la anticoncepción femenina y la incorporación de la mujer a la vida laboral, la progresiva secularización de la sociedad, el aumento gigantesco de los estados socialdemócratas ("el estado te cuidará de la cuna a la tumba"), los avances médicos y de esperanza de vida, las telecomunicaciones y el abaratamiento de la tecnología... Todo esto crea un cóctel perfecto para:
- Abandonar el concepto tradicional de "familia" como red de seguridad y sustento ("el estado te cuidará")
- La priorización de la carrera laboral y el ocio por parte de las parejas, sobre todo por parte de las mujeres, todo ello atizado desde lo público con un mal entendido concepto de "querer ser como los hombres".
- Un mal entendido concepto de "carpe diem": los hijos son vistos como competencia del ocio y por tanto hay que intentar hacer todas las cosas posibles (viajar, comer, deporte, etc) antes de tener hijos
- El abandono de los sentimientos religiosos, muy proclives a los valores de la familia, que pierden peso.
- Una continua y ascendente sensación de "competencia" inconfesa entre los ciudadanos por querer hacer más cosas que el vecino, visitar más lugares exóticos y comer en más restaurantes.
En definitiva, no tenemos hijos porque no queremos. No es un problema de dinero, aunque lo intenten vender así. Da igual que den ayudas por tener hijos, que te paguen una parte del alquiler, que te desgraven IRPF, que te regalen las guarderías, que puedas modificar horarios laborales, que te den 2 años de permiso pagado de nacimiento, que construyan parques infantiles... Nada de esto funcionará porque la "degeneración" que mencionaba carrion seguirá, porque nada tiene que ver con el dinero, la pobreza o la riqueza.
Todo eso hace que se dé una hecho paradójico: en el pasado, cuando todo el mundo estaba a un resfriado de no sobrevivir a un invierno, se le daba mucha importancia al "legado", al largo plazo, a lo que uno dejará en el mundo cuando se vaya (hijos, familia, patrimonio...) Ahora, teniendo una esperanza de vida de más del triple, que vivimos más y mejor que nunca, se le da importancia al corto plazo, al ocio inmediato, al aquí y ahora, como si tuviéramos prisa, y para lo demás ya habrá tiempo...
Pero no lo hay, y cuando te das cuenta te arrepientes...