Respuesta: La Iglesia y la Familia.
Yo no tengo nada en contra de la religión en general, o la católica en particular. Es más, creo que, más allá de que exista o no un Dios, o varios, la fe ha ayudado a millones de personas a lo largo y ancho del mundo; ayudándoles a sobrellevar momentos malos, a tener una imagen más positiva de si mismos, de la vida... y me parece maravilloso.
El problema es que la Iglesia católica hoy en día, no tiene NADA que ver con la religión, o con el amor, la compasión, el perdón, o cualquier otro valor que la religión promulgue. Solo por decir las sandeces que algunos dicen en televisión, debería estar considerada (y afortunadamente, cada día lo está por más personas) como una secta peligrosa que promulga el fanatismo y la ignorancia ciega más estúpida. Y si no, decidme cómo llamáis a esconder y tratar de tapar casos de pedofilia, de niños violados y traumatizados de por vida, casos que son escondidos o que si salen a la luz, son rápidamente "perdonados" por las altas instancias, mientras estos señores hablan en contra de que dos personas adultas del mismo sexo puedan hacer con mutuo consentimiento, lo que les de la gana. Por no hablar de la condena del preservativo, que debería ser suficiente, en pleno siglo XXI para desacreditar a cualquier organización.
Insisto que no cargo contra la religión en general, ni con ninguna en particular, sino con una organización con ánimo de lucro e ideas totalmente deleznables. Creer en Dios, ir a la Iglesia en domingo y bendecir la mesa no tiene nada que ver con que el cura de mi pueblo se haya gastado un pastizal en ponerse unas puertas doradas en la Igleisia. Ni tampoco con que en el terreno adyacente a la parroquia, terreno donde han jugado los críos desde los tiempos de mi abuelo, se haya construido una casa particular para él solo. No un comedor para pobres, o una organización de ayuda caritativa. Un chalet privado
Se supone que la igleisa es un lugar para ir a rezar y a confesarse, no sé donde dice en la Biblia que deba parecer el palacio de la Casa Real. Y solo es un cura de pueblo. Apuesto a que los altos cargos eclesiásticos no viven precisamente peor.
Mal de muchos, consuelo de tontos, si Dios existe realmente, al menos la mayor parte de estos cabrones arderán en el infierno.