Aunque ya comienzan a flexibilizarse las restricciones, aún hay
muchas prácticas que no se pueden realizar en las zonas de fase 0 de desescalada. Por ejemplo, el
uso del coche -así como el transporte público, la bicicleta y el patinete- está permitido para los mismos desplazamientos que ya estaban autorizados antes de que se pusiera en marcha el plan de desescalada. Es decir, para la adquisición de alimentos, productos farmacéuticos y de primera necesidad; asistencia a centros, servicios y establecimientos sanitarios; desplazamiento al lugar de trabajo y retorno al lugar de residencia habitual; asistencia y cuidado a mayores, menores, dependientes, personas con discapacidad o personas especialmente vulnerables; desplazamiento a entidades financieras y de seguros; o por causa de fuerza mayor o situación de necesidad.
Además, también se podrá utilizar para ir a establecimientos que están abiertos con cita previa, como peluquerías, tiendas de ropa o zapaterías, entre otras.
Por último, la circulación está limitada
dentro del municipio del domicilio actual.
Limitaciones a la movilidad en las zonas de fase 1
En esta etapa ya pueden ir en el coche
todas las personas que residan en la misma dirección domiciliaria y se podrán desplazar, por ejemplo, a establecimientos hosteleros, terrazas y mercadillos.
También se podrá usar el vehículo privado para
visitar a familia y amigos, porque se permitirán reuniones de 10 personas como máximo. Eso sí, los desplazamientos quedan restringidos a la
misma provincia, o departamento de salud, donde se encuentra el domicilio habitual. No se permiten desplazamientos entre áreas con diferente fase de desescalada. El ministro de Sanidad ha insistido en que se circunscribe al interior de la unidad de referencia, que en la mayoría de los casos es la isla o la provincia, aunque también ha recordado que en algunos casos se han tenido en cuenta áreas sanitarias.
Hay
algunas excepciones en las que se permitirá traspasar el límite de la provincia, isla o unidad territorial de la que se trate «por motivos sanitarios, laborales, profesionales o empresariales, de retorno al lugar de residencia familiar, asistencia y cuidado de mayores, dependientes o personas con discapacidad, causa de fuerza mayor o situación de necesidad o cualquier otra de análoga naturaleza».
También se permite, en la fase 1, la movilidad interterritorial entre municipios colindantes de tránsito habitual para la realización de actividades socioeconómicas, por ejemplo para reparar el coche.
Por último, el
Gobierno ha cambiado de criterio y
permite ahora los desplazamientos a segundas residencias dentro de una misma provincia, isla o área sanitaria autorizada.