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Respuesta: El Spielbergpost
LA LISTA DE SCHINDLER (TRANCO II)
Y entonces empieza la matanza del guetto. De verdad, ¿no creéis que me quedo corto si digo que es una de las grandes set del bélico y una cima de los 90? De veras, creo que es poca cosa decir eso frente a lo que se otea ahí. En cuanto al momento PIANO-MATO me parece PERFECTO. Daos cuenta que el que toca el piano es un NAZI. ¿No pensáis que es lo que se sentía cuando se hacía eso, desde el punto de vista alemán? Para ellos era un ritual donde ni sentían ni padecían y entiendo que la cosa podía ser hasta bella. La lírica se vuelve lícita, del todo. Y lo más escalofriante: común.
La niña de rojo. Por Dios, la niña de rojo, ahora sí que ya cuadra todo. MIRAD LA PORTADA DE LA PELI. Es la mano de Schindler salvando a la nena. O sea, lo que le gustaría haber hecho, lo que después hace con más de mil personas y lo que todos nosotros querríamos hacer. ¿Qué puede dar más grima que la muerte de esa inocencia? Las fotos y los vídeos nazis al respecto, con miles de niños pereciendo, es una de las cosas más conmovedoras que he visto siempre. El tintar de rojo el motivo es una bella decisión revolucionaria, me parece maestro. Es EL MOTIVO.
POR CIERTO, tirón de orejas para Spielberg en esa secuencia. Fijaos al principio de la secuencia de la niña, en un plano generalísimo de ella donde un alemán fusila a un tío. Por DIOs, el audio de los disparos está DESCOORDINADÍSIMO.
Y a partir del aquí, empieza el bacalao. Spielberg se suelta el pelo y tenemos más de una hora de ECLOSIÓN. Set pieces unidas por el mínimo hilo narrativo (su estilo y el de Kubrick, bello y seguro de sí mismo) que son absolutamente DESCARNADAS y que tiene a todo el equipo en estado de gracia. Me encanta la decisión de usar muñecos en las muertes, dando una fisicidad difíciilmente soportable. Malditos tiempos pésimamente llevados del digital. Me chifla el momento que Schindler vuelve a ver a la niña muerta, donde comenzaría el TRANCO III. Esa cara es el horror absoluto ante semejante aberración. Hace sentirse muy identificado y me creo por completo la metamorfosis, ya que EL MOTIVO es salvaje y mueve montañas.
Y es que todo el mundo se quedó boquiabierto al ver a ese Spielberg en ECLOSIÓN porque, claro, no debían haberse fijado mucho en El imperio del sol.
Y la música, esa música...
Sin duda, esta hora y pico no le va a la zaga a la hora y pico anterior...
LA LISTA DE SCHINDLER (TRANCO II)
Y entonces empieza la matanza del guetto. De verdad, ¿no creéis que me quedo corto si digo que es una de las grandes set del bélico y una cima de los 90? De veras, creo que es poca cosa decir eso frente a lo que se otea ahí. En cuanto al momento PIANO-MATO me parece PERFECTO. Daos cuenta que el que toca el piano es un NAZI. ¿No pensáis que es lo que se sentía cuando se hacía eso, desde el punto de vista alemán? Para ellos era un ritual donde ni sentían ni padecían y entiendo que la cosa podía ser hasta bella. La lírica se vuelve lícita, del todo. Y lo más escalofriante: común.
La niña de rojo. Por Dios, la niña de rojo, ahora sí que ya cuadra todo. MIRAD LA PORTADA DE LA PELI. Es la mano de Schindler salvando a la nena. O sea, lo que le gustaría haber hecho, lo que después hace con más de mil personas y lo que todos nosotros querríamos hacer. ¿Qué puede dar más grima que la muerte de esa inocencia? Las fotos y los vídeos nazis al respecto, con miles de niños pereciendo, es una de las cosas más conmovedoras que he visto siempre. El tintar de rojo el motivo es una bella decisión revolucionaria, me parece maestro. Es EL MOTIVO.
POR CIERTO, tirón de orejas para Spielberg en esa secuencia. Fijaos al principio de la secuencia de la niña, en un plano generalísimo de ella donde un alemán fusila a un tío. Por DIOs, el audio de los disparos está DESCOORDINADÍSIMO.
Y a partir del aquí, empieza el bacalao. Spielberg se suelta el pelo y tenemos más de una hora de ECLOSIÓN. Set pieces unidas por el mínimo hilo narrativo (su estilo y el de Kubrick, bello y seguro de sí mismo) que son absolutamente DESCARNADAS y que tiene a todo el equipo en estado de gracia. Me encanta la decisión de usar muñecos en las muertes, dando una fisicidad difíciilmente soportable. Malditos tiempos pésimamente llevados del digital. Me chifla el momento que Schindler vuelve a ver a la niña muerta, donde comenzaría el TRANCO III. Esa cara es el horror absoluto ante semejante aberración. Hace sentirse muy identificado y me creo por completo la metamorfosis, ya que EL MOTIVO es salvaje y mueve montañas.
Y es que todo el mundo se quedó boquiabierto al ver a ese Spielberg en ECLOSIÓN porque, claro, no debían haberse fijado mucho en El imperio del sol.
Y la música, esa música...
Sin duda, esta hora y pico no le va a la zaga a la hora y pico anterior...
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