No sé lo que ocurrirá en este juicio. Es imprevisible. Pero de lo que sí estoy seguro es de que Ross Brawn no se fue a Montmeló con el coche de esta temporada sin tener garantías por parte de la Federación Internacional. Conozco muy bien a Ross, he trabajado con él muchos años, y estoy convencido de que tiene algún documento escrito y firmado por algún responsable de la FIA que justifica sus actos. También estoy seguro de que fue Pirelli quien les pidió que utilizaran el coche de esta temporada, porque era el que les estaba generando más problemas. La cuestión es que Mercedes no quiere hablar hasta que presente sus alegaciones ante el Tribunal. Y Pirelli ya está sugiriendo que si no puede realizar test en los circuitos durante la temporada tal vez no le interese seguir en la F-1. Lo que, por el momento, nadie sabe es si todo esto responde a una estrategia de Todt para cambiar de proveedor de neumáticos.